En enero de 2020 el técnico español Jordi Cruyff firmó por dos años y medio para ser el entrenador de la selección ecuatoriana de fútbol.
El hijo del histórico Johan, deembarcó junto a su cuerpo técnico en Ecuador con el objetivo de clasificar al combinado tricolor a próximo mundial.
Sin embargo, por diferentes razones, el estratega nunca pudo dirigir una sola práctica in situ (armó algunos entrenamientos vía zoom) y menos se sentó en la banca en un partido amistoso u oficial.
El 15 de marzo el hispano volvió a España para pasar la cuarentena y nunca volvió, por lo que de común acuerdo con la Federación Ecuatoriana de Fútbol, se puso fin a su contrato.
Como había una cláusula de rescisión en favor de la FEF, las partes llegaron al siguiente acuerdo: El técnico no pagará el millón de la moneda americana que debía depositar si decidía dejar el cargo a cambio de no cobrar los cuatro meses que le adeudaban.
Eso sí, igualmente Cruyff llegó a recibir dos meses de sueldo, es decir, unos trescientos mil dólares, unos 233 millones de pesos chilenos.
Néstor Gorosito es uno de los firmes candidatos de la Federación Ecuatoriana para reemplazar en el cargo al entrenador que nunca dirigió.