Mujeres líderes hay en todos los rubros. Esta vez conversamos con Macarena Blanc, mujer líder en compliance que en otras palabras, es un rol dedicado a la prevención de la ocurrencia de ilícitos como en el caso del compliance penal pero también dedicado a la prevención de incumplimiento de leyes como podría ser el compliance laboral o del consumo.

Blanc explicó que se trata de “llevar a cabo un adecuado desarrollo y ejecución de controles que colaboran en la mitigación de riesgos de incurrir en prácticas anti-éticas o ilegales, es una tarea que recae sobre toda la organización, y no debe ni puede depender de una sola persona”.

Sobre cómo nació su vínculo con el compliance, Macarena aseguró que más que se hubiese interesado en esta temática en términos de querer dedicarse a eso, es que el área la encontró: “Una vez que surgió la necesidad en Adexus de contar con un líder que dotara de vida y dinamismo a nuestro actual sistema de compliance, me pareció interesante la propuesta porque ofrece la posibilidad de mezclar muchas áreas un tanto desconocidas -en aquel entonces- para una abogada in house tales como: derecho penal, acercamiento a las normas ISO, auditoría e incluso algo de docencia cuando debes entrenar en estas materias”

“Asimismo, ofrece la posibilidad de sentir que se aporta a que seamos mejores personas y ese aspecto, sin duda nos acerca a la responsabilidad social empresarial que siempre es gratificante”. Por otro lado, Macarena se refirió a cómo ha sido su experiencia en el área y señaló que “hasido enriquecedora desde muchos ámbitos, es decir, en general quiénes nos dedicamos a compliance sabemos que el perfil desarrolla criterio, confianza, colaboración, pero, sobre todo, transforma en una profesional valiente y decidida cuando la ocasión lo amerita”

“Incluso, me atrevería a pensar que el Oficial de Cumplimiento debe estar dispuesto a poner su cargo a disposición cuando se genera espacio para algún tipo de conflicto de interés porque no es fácil depender del Directorio y tener que ser el “stopper fundado” frente a alguna mala práctica que eventualmente se estuviere cometiendo. Es decir, en este ámbito, no vale una profesional que esté de acuerdo o que diga que sí a todo porque sencillamente no estarías cumpliendo con el trabajo que se te encomendó”, añadió.

¿Qué tan complicado es para una mujer acceder a estos puestos? Blanc indicó que “en general, es complicado acceder a todo rol de liderazgo para una mujer ya que aún se tiene la creencia errada de que no somos capaces de aportar desde lo estratégico. En ese sentido, agradezco el hecho de que en Adexus casi siempre se ha pensado en mujeres a la hora de liderar el área legal o de compliance. Falta mucho por avanzar, pero al menos ya se están visibilizando las barreras de entrada que existen a la hora de contratar mujeres en cargos de dirección”

Macarena mencionó a sus referentes femeninos en esta área y sostuvo que “me permito traer a colación el grupo Women in Compliance Chile (WIC), liderado por Tamara Agnic y Susana Sierra, tremendas expositoras y mentoras en estas materias, son mujeres extremadamente hábiles en el tratamiento de estas temáticas y muy generosas a la hora de compartir sus experiencias con todas quienes pertenecemos a WIC, somos más de 500 en el grupo y todas nos apoyamos muchísimo, se genera día a día un espacio muy colaborativo en donde la solidaridad está muy presente y de manera desinteresada.

¿Hacia dónde apunta el mundo del compliance y de qué manera las mujeres pueden ser un apoyo en esta materia? Macarena Blanc lo explicó de la siguiente manera: “Antes de responder a esta consulta, recordaré parte de la exposición de Rodrigo Reyes, director Jurídico de la consultora Prelafit, quién siempre comentaba en sus cátedras que el compliance debe avanzar desde los requirements hacia los committment”.

“Es decir, no sólo nos debemos plantear si una situación es contraria a la ley, sino también cómo nos afecta moralmente o cómo afecta a aquellas normas que hemos asumido voluntariamente; es decir, tenemos que realizarnos la pregunta de si tal o cual acción podría eventualmente afectar la imagen corporativa de nuestra organización. En este sentido, es importante recalcar que una buena imagen corporativa forma parte de la productividad y cuidar de la imagen es, sin duda, una inversión con retorno”.

Por último, para Blanc “sin duda las mujeres somos un gran aporte en el cargo cuando contamos con muchas de las habilidades que se requieren para desempeñar la función tales como el manejo de asuntos confidenciales o de información sensible, la comunicación asertiva, inspirar confianza y el criterio con el que se debe contar frente a los dilemas éticos”, cerró.