Tuvieron que pasar exactos ocho meses para que Colo Colo volviera a ser el único líder del Campeonato Nacional 2024 y bajar de esa posición al archirrival Universidad de Chile, en una segunda rueda perfecta para el equipo de Jorge Almirón.

Desde su llegada al Cacique, tras llegar a la Final de Copa Libertadores 2023 con Boca Juniors, los números del nacido en San Miguel, provincia de Buenos Aires, son más que positivos, con un 65.25 por ciento de rendimiento, a nivel local e internacional.

Sin embargo, a pesar de tener una ventaja mínima en la Tabla de Posiciones, nada le garantiza a Almirón poder terminar con Colo Colo campeón, y es acá donde aparece una maldición que carga hasta hoy, y que espera erradicar en suelo chileno.

El tema es que durante su extensa carrera como entrenador, tanto en Argentina como Colombia, México, España y Arabia Saudita, el trasandino ostenta apenas tres títulos a su haber, todos ellos durante una de sus mejores etapas como entrenador.

Jorge Almirón quiere erradicar su maldición sin títulos en Colo Colo (Photosport)

La maldición que Almirón quiere erradicar en Colo Colo

El estratega inició su trayectoria como entrenador en el 2008, al mando del Dorados de Sinaloa, es decir, lleva 16 años de carrera en ese puesto, y en todo ese tiempo sólo pudo coronarse campeón en tres ocasiones, todas ellas con Lanús.

Fue en el año 2016, donde Almirón conquistó el torneo de Primera División en Argentina, tras ganar la Zona B con 38 puntos y enfrentarse en una Final al San Lorenzo de Pablo Guede en el Estadio Monumental de Buenos Aires, con una recordada goleada por 4-0.

Ese mismo año, conquistó la Copa del Bicentenario de la Independencia, tras ganarle por 1-0 a Racing, y posteriormente conquistar la Supercopa Argentina al golear por 3-0 a River Plate, a comienzos de 2017, una campaña que terminaría con una Final de Copa Libertadores que pierde con Gremio.

Es decir, Jorge Almirón arrastra una sequía de ocho años sin ganar títulos. Una maldición que buscará erradicar en las próximas cuatro semanas, cuando Colo Colo vaya en busca de la ansiada estrella número 34.