Liverpool cumplió con lo esperado y salió a arrasar en los primeros minutos del partido de vuelta de los cuartos de final de la Champions League ante Real Madrid por la necesidad de marcar dos goles para remontar en el marcador global. El comienzo del compromiso fue todo para los de rojo.
Y los de Anfield estuvieron a nada de conseguir el primer tanto que pusiera presión extra para los merengues de no ser por la providencial aparición de Thibaut Courtois en dos ocasiones. La primera de ellas llegó al segundo minuto con un pelotazo largo que Sadió Mané le bajó a Mohamed Salah, con el egipcio quedando mano a mano pero el portero belga, casi vencido, la sacó con el pie.
Fue un tramo de partido intenso para la defensa del Real Madrid que casi ve, nuevamente, cómo caía su arco. En esta ocasión fue Salah quien asistió y encontró por todo el centro a James Milner quien desde la media distancia no se lo pensó y soltó un derechazo que buscaba el ángulo pero la mano de Tibu la mandó al tiro de esquina.
Fueron dos intervenciones de lujo para que los dirigidos por Zinedine Zidane no empezaran el partido con tantísimas preocupaciones ante un Liverpool que no puede dar ninguna concesión que le dificulte aún más la búsqueda de la hazaña.
Real Madrid enfrentaba el partido de vuelta de los cuartos de final de Champions League luego de imponerse 3-1 en el Estadio Alfredo di Stéfano gracias a una gran actuación de Vinicius Junior, quien se despachó un doblete.