Desde que a fines de 2017 se revelaron las reprochables conductas de acosos y abusos sexuales de parte del reconocido productor hollywoodense Harvey Weinstein, no han parado de surgir testimonios de sus víctimas. El testimonio más reciente es el que entregó la actriz Jennifer Aniston, quien aseguró haber sido una más de las personas afectadas por los patrones de conducta del magnate.

En conversación con Variety, Aniston recordó episodios vividos en torno a la filmación de la película "Derailed", de 2005, la que fue producida por Weinstein. 

"Tuve que interactuar con él (Harvey Weinstein) varias veces. La vez que más recuerdo fue durante la cena posterior al estreno del filme. Yo estaba sentada en una mesa con Clive (Owen), con los productores y con un amigo mío y él de repente llegó y lo primero que hizo fue a acercarse a mi amigo y ordenarle que se levantara", explicó.

Según la actriz, "yo no podía creerlo. Pero mi amigo no tuvo más remedio que levantarse y ponerse en otro sitio en la mesa para que Harvey (Weinstein) se sentara a mi lado. Fue una demostración del nivel de comportamiento asqueroso y prepotente que tenía relacionándose con todo el mundo".

Aniston, eso sí, advirtió que en ningún momento fue abusada por Weinstein.

"Era muy listo. Recuerdo que aquel año (2005) su exmujer, Georgina, había lanzado su marca Marchesa. Y él (Hervey Weinstein) decidió venir a visitarme a Londres mientras estábamos rodando la película (‘Sin Control’) para decirme que le gustaría que llevara uno de sus vestidos al avant premiere", contó.

La situación continuó con Aniston revisando el catálogo "y en aquella época Marchesa no era lo que es hoy. Simplemente, su ropa no era para mí. Pero el insistió en que tenía que llevar un vestido diseñado por Georgina. Ése fue el único ‘bullying’ que me hizo. Aunque no sirvió de nada porque yo le dije que no. ¿Qué iba hacer? ¿Obligarme?".