No hay que confundirse, esto más que un concierto es un espectáculo de un solo hombre. No se ve banda, no hay arreglos complejos, improvisaciones, o salidas de libreto, solo versiones de sus canciones mezcladas a la perfección para entregar un combinado infalible en directo; Bad Bunny es el centro y amo absoluto de la atención en su nueva visita a Chile.

Pero hay que partir mencionando que el aprendizaje fue rudo, pero Bizarro y las autoridades entendieron. Con un público tan popular como el de Daddy Yankee, el escenario en las afueras del Estadio Nacional fue muy distinto. Estricto control perimetral de Carabineros y orden absoluto en los accesos.

Igualmente hubo quienes intentaron colarse, pero el intento de avalancha de vio rápidamente aplacado. “Se hizo un trabajo con los grupos de WhatsApp que se estaban organizando para hacer daño, pero se pudo contener”, indicó el director de Bizarro, Alfredo Alonso. Y añadió: “Todos vamos aprendiendo en el camino”, para resaltar el trabajo conjunto con las autoridades.

De hecho, en un momento, Grecia parecía más una pasarela de modas que una arteria urbana principal. Los variopintos looks que se podían apreciar en las filas para entrar al recinto ñuñoíno sólo eran testimonio de lo transversal del público que convoca Benito Martínez. Desde modelos que parecían ir a una gala; figuras con la tenida más cómoda que pudieron encontrar con buzos, gorros de pescador, lentes de los más diversos colores y formas, imitando la apariencia del artista; y hasta en bikinis andaban algunas personas, plegándose con el concepto playero del tour.

Young Cister fue el encargado de preparar el ambiente para el plato principal. El chileno hizo un show correcto, en solitario sobre el escenario, siempre acompañado de sus pistas, que eran reconocidas inmediatamente por un público que coreó la mayoría de las canciones, y por momentos contando con un cuerpo de baile que potenciaba los movimientos que ya estaban en marcha entre los asistentes. Sin duda, uno de los momentos más aplaudidos fue la invitación que hizo a Pailita, quien dio una muestra de lo que será el presentación de apertura que hará para el segundo show del puertorriqueño este sábado.

Ganas, Casi amor de verano, Sextime y Caminemos de la mano, fueron algunas de las canciones que ofreció Young Coster en casi una hora de espectáculo.

¿Cómo fue el concierto de Bad Bunny en Chile?

Más tarde, puntual, a las 21:00 horas se apagaron las luces. Cuando parecía que el asunto era una falsa alarma, Bad Bunny hizo su aparición en el escenario. Sentado en una silla, al lado de una nevera, en medio de una escenografía que emulaba una paradisíaca playa, siguiendo las pautas de los visualizer promocionales de su disco Un Verano sin Ti, la placa de 2021 que sustentó gran parte de lo que ofreció en esta velada.

Moscow Mule dio la partida, mientras que Me Porto Bonito fijó el tono de una noche en que serían coreadas cada una de las canciones que el cantante traía en su bolsillo. Un perreo con una de las palmeras que lo acompañaban y luego los fans cantando en masa, dieron cuenta de que la fiesta estaba desatada.

Después de Un ratito vino el momento que todo tiktoker esperaba: “El-ga-ti-to-tuyo-te perdió”, cantó Benito para hacer Efecto.

¡Así se vivió Bad Bunny en Chile! (Foto: Guillermo Salazar)

¡Así se vivió Bad Bunny en Chile! (Foto: Guillermo Salazar)

Una extensa pausa y un refresco que sacó de su nevera fue el preámbulo para el primer diálogo del puertorriqueño con su séquito en Santiago.

“¡Buenas noches Chile! Se siente cabrón estar de nuevo aquí con ustedes después de tanto tiempo. Bienvenidos al World’s Hottest Tour, el Tour Más Caliente del Mundo entero. Esta noche le toca a Chile, ¡por fin! Esta es la razón por la que yo estoy aquí, para que ustedes la pasen bien. Quiero que esta noche sea de ustedes, que bailen, que suden, que brinquen, que hagan lo que ustedes quieran. ¿Cuántos me extrañaban en Chile?”, preguntó Benito para detonar definitivamente la euforia en el lugar.

Recién en la quinta canción el artista se despojó de su soledad y un team de baile se reunió con él en el escenario para hacer Party, Tarot, La Corriente, Neverita y Estamos bien. El escándalo ya estaba planteado, no había vuelta atrás entre los beats que coqueteaban con la EDM y las cuidadas y coloridas visuales que acompañaban en las pantallas.

Sacando un recurso del libro de Coldplay, el World’s Hottest Tour también incorpora a la parranda pulseras luminosas, inundando de color el principal coliseo del país al ritmo de una música ciertamente mucho más energética que la de los ingleses; en una presentación que definitivamente fue de menos a más, navegando entre éxitos agitados y para el baile, pero también abriendo espacio a momentos más calmos y emotivos.

De repente, la voz de Jorge González interpretando Tren al Sur. Y el coro de la gente con la inolvidable letra. Una pausa para Bad Bunny, mientras los bailarines se desplegaron por la pasarela que finalmente cobró vida en el centro del coliseo. Un extracto de Te Boté sonó entonces, y luego Si Veo a tu Mamá, además de Bichiyal.

Benito Martínez Ocasio tiene todo bajo control. No se le va nada, sabe manejar a la fanaticada y también complacerla. Este no era un evento para contemplar solamente, sino que para sumergirse en la experiencia.

“Yo hago lo que me da la gana en Chile”, advirtió el Conejo Malo, antes de invitar a Pablo Chill-E a hacer la canción Hablamos Mañana, de YHLQMDLG, uno de los dos discos que lanzó en 2020, y que tenía su presentación en vivo pendiente en el país.

¡Así se vivió Bad Bunny en Chile! (Foto: @estricolor)

¡Así se vivió Bad Bunny en Chile! (Foto: @estricolor)

“Se siente bien cantar estas canciones acá. Faltaban”, admitió el artista, como disculpándose por su ausencia en pandemia. La gente ya le tenía todo perdonado y quería más.

Yo perreo sola abrió la pirotecnia, puso fuego en el escenario, cambió la iluminación, se incorporaron lásers; todo para que llegara Safaera.

“Que viva el perreo. Que viva el reggaetón. ¡Que viva Chile!”, remató Bad Bunny, en uno de los momentos verdaderamente altos de la jornada.

¡Así se vivió Bad Bunny en Chile! (Foto: Guillermo Salazar)

¡Así se vivió Bad Bunny en Chile! (Foto: Guillermo Salazar)

Un delfín inflable flotó sobre el público hacia Andes en Dákiti y el carrete volvió a cobrar fuerza con Titi me preguntó, en una imparable batería de éxitos que mantiene al artista boricua en lo más alto de los rankings del mundo así como el artista más escuchado de Spotify.

Y otra intervención de Benito: “Extrañaba esa energía de Chile, escucharlos cantar mis canciones”. Ya podía hacer lo que quisiera. Se sentó en medio de su playa y declaró que Yo no soy celoso, mientras que pegadita llegó Yonaguni y luego Callaíta.

También pudo guardar silencio y darse una larga pausa para saludar de cerca al público en el estadio, desde la pasarela que lo llevó al centro de todo.Chambea, Soy peor y Un verano sin ti fue la selección al rodearse de su público. Pero lo mejor estaría por venir: tomó la palmera que lo esperaba en la tarima y se elevó para irse flotando sobre los asistentes, llegando incluso a pasearse sobre la galería al mismo tiempo que interpretaba Un Coco.

El puertorriqueño se posiciona así con uno de los shows más destacados del año. Con entradas agotadísimas en apenas en horas, y replicando el fenómeno cuando nuevos tickets salieron a la venta esta misma semana. Muchos querían ser parte de lo que el artista más cotizado del momento se traía entre manos. No por nada se vio a figuras tan populares como los Power Peralta o Naya Fácil entre los presentes, por momentos hasta captando algo atención.

Me fui de vacaciones planteó la sección final de un setlist de casi 50 canciones que sonaron a través de dos horas y media de espectáculo en que Bad Bunny casi no salía de escena.

Ojitos lindos fue momento especial, sellado con un corazón en formado con las manos del artista, mientras que la energía de El Apagón y Después de la Playa sentenciaron el primero de los dos conciertos que el cantante tiene en Chile. Demostrando sobre todo que su rendimiento puede ir desde al trap al reggaetón, pero también se da el lujo de escaparhacia melodías alejadas del género urbano en la construcción del show, como la música electrónica y la salsa. El hombre abarca todo el espectro y ni se cansa.

Ahora sólo le falta su segunda vuelta este sábado en Chile, para luego saltar la cordillera y ofrecer otros dos fechas en Buenos Aires, en una gira que continúa y que aún está lejos de terminar.

¡Así se vivió Bad Bunny en Chile! (Foto: Guillermo Salazar)

¡Así se vivió Bad Bunny en Chile! (Foto: Guillermo Salazar)

Bad Bunny en Chile | ¿Qué canciones cantó?

Moscow Mule
Me porto bonito
Un ratito
Efecto
Party
Tarot
La corriente
Neverita
Ni bien ni mal / 200 MPH / La romana / Estamos bien
Tren al sur
Te boté
Si veo a tu mamá
La difícil
Bichiyal
La santa
Una vez
Hablamos mañana (con Pablo Chill‐E)
Vete
Yo perreo sola
Safaera
120
Hoy cobré
Maldita pobreza
Antes que se acabe
Te mudaste
Booker T
DÁKITI
Tití me preguntó
Yo no soy celoso
Yonaguni
Callaíta
Dos mil 16
Diles
No te hagas
Pa ti
Vuelve
Tú no metes cabra
Chambea
Soy peor
Un verano sin ti
Un coco REMIX
Un coco
La canción
Me fui de vacaciones
Ojitos lindos
El apagón
Después de la playa