Un descollante primer tiempo del brasileño Raphinha le dio a Barcelona la clave para derrotar a Real Madrid en el inédito clásico español jugado en Las Vegas, en el marco de la pretemporada 2022. El refuerzo que llegó desde el Leeds de Marcelo Bielsa marcó el único gol y les dio la victoria a los Azulgrana (1-0) en un partido de altísima intensidad.

La prueba estuvo precisamente en la acción del gol, que fue la respuesta del Barça a un violento remate de Federico Valverde que se estrelló en un palo. El dominio era de los hombres de Xavi Hernández, mientras los Merengues retrocedían y sentían la amenaza de la presión alta de los catalanes... hasta que se quebró el jarro.

Hasta cuatro jugadores del Barcelona hostigaron a Thibaut Courtois y su defensa hasta que un rechazo defectuoso de Eder Militao encontró a Raphinha con el tiempo y el espacio para gatillar. Y sin más, colgó el balón en el ángulo superior izquierdo del arco madridista, en la apertura de la cuenta de un partido especialmente disputado.

Es que nadie quería desentonar. Y menos Robert Lewandowski, quien se estrenó en el Barcelona en un tridente de tonelaje, junto a Raphinha y a Ansu Fati. Todavía les falta conocimiento -lo mostró el bisauguineano cuando pateó al marco aunque Lewy estaba en solitario-, pero la amenaza está clara para el resto de Europa.

 El balance final mostró a un Barcelona más encendido, mientras que el equipo de Carlo Ancelotti volvió a adolecer en la generación, por una mala noche de Eden Hazard. Aurélien Tchouaméni debutó en la posición de Casemiro, pero no fue una velada de volumen ofensivo y los cambios del segundo tiempo le pusieron llave al marcador.

Vale destacar también el debut de Antonio Rüdiger como marcapunta izquierdo del elenco merengue, con una interesante proyección que llevó susto a la cabaña de Marc-André ter Stegen. En definitiva, un apronte que utilizaron ambos entrenadores para mover la totalidad de la plantilla, pero en la que Barcelona mostró las ideas necesarias para una sólida victoria.