Manchester City se metió este miércoles en la final de la Copa de la Liga, luego de perder como local ante Manchester United, pero con mejor diferencia en el global.

Dicho certamen, conocido como Carabao Cup, lo ha jugado siempre el arquero chileno Claudio Bravo, quien fue confirmado por el entrenador Pep Guardiola para el duelo por el título ante Aston Villa.

“La temporada pasada cambié a Ederson por Aro Muric, porque jugábamos contra el Chelsea y tenían una presión arriba increíble y necesitábamos jugar mejor y más rápido en la creación. Claudio Bravo jugará la final”, aseguró el catalán.

De esta forma el seleccionado nacional se prepara para sumar en cancha un nuevo título con el conjunto inglés.

La final se jugará el 1 de marzo en Wembley.