Una noticia terrible recibió la Selección de Senegal el pasado fin de semana. Su principal figura, Sadio Mané, sufrió una lesión en su peroné en el duelo en que su equipo, el Bayern Múnich, goleó por 6-1 al Werder Bremen. Por lo mismo, debió ser reemplazado, generando incertidumbre sobre su situación física.
Sin embargo, no fue hasta después del partido cuando se levantaron todas las alarmas. Y es que el diario L'Equipe aseguró que el jugador africano no sería parte del Mundial de Qatar, contradiciendo lo señalado por el propio parte médico del equipo alemán, quienes fueron más cautos y dijeron que debía analizarse su presencia en el torneo.
Sin embargo, poco de eso importó en tierras senegalesas. Y es que el cuerpo técnico liderado por Aliou Cissé, ya que de cualquier forma llevarán a la superestrella, apostando por una milagrosa recuperación.
De hecho, es tal la necesidad de los senegaleses de contar con el jugador, que apostarán incluso a la brujería. "Vamos a utilizar brujos. No sé si son eficaces, pero vamos a usarlos de todos modos. Esperemos que haya un milagro. Tiene que estar ahí”, señaló la senegalesa Fatma Samoyu, secretaria general de la FIFA.
De cualquier forma, en Senegal cuentan con otras figuras de buen nivel europeo, como Edouard Mendy, Kalidou Koulibaly, Bamba Dieng o Pape Gueye.
Vale recordar que Senegal integra el Grupo A de la competencia, comparte esa zona con Qatar, Ecuador y Países Bajos. Su debut será ante Países Bajos el 21 de noviembre. Habrá que ver si con Sadio Mané o no.
