Este miércoles, el animadorJulio César Rodríguezse emocionó hasta las lágrimas y no pudo contenerel llanto en pantalla, cuando en medio de “Contigo en la Mañana” abordaron un caso que le hizo recordar a su fallecido hijo,Pablito, de quien ya había hablado previamente en televisión, en una emotiva entrevista que se emitió hace tres años y con la quemostró toda su sensibilidad.

El niño nació como fruto del primer matrimonio delrostro de Chilevisión, que lo uniócon Susana Flores. Por ese entonces, Rodríguez aún estudiaba Medicina, algo que hizo hasta el sexto año, por lo que cuando le llegó el golpe, entendió completamente lo que significaba.

Rodríguez habló de sus experiencias con Pablito en un ya lejano capítulo del programa “El Cubo”, que se emitió en octubre de 2017. Allí contó que “al principio yo pensé que era autista, cuando era bien chiquitito. Susana, la mamá de Pablito, tenía la esperanza de que no fuera algo tan severo, porque estamos hablando de los primeros meses”.

Ella “sentía que se conectaba súper poco, y Susana, que era muy valiente, decía ‘hagámosle todos los exámenes que hay que hacer’, porque no quería tomar mamadera”.

Julio César Rodríguez en el set de “El Cubo”, momento en el que contó la historia de su fallecido hijo Pablito.

El hijo de Julio Césarpadecía Síndrome de Dandy-Walker, anomalía congénita que le impedíahablar ycaminar. Apenas podía moverse. A lo que se suma que no podía generar un vínculo con las personas, ni siquiera con sus padres. Eso hasta que tristemente falleció a los 13 años, en mayo de 2007.

“En el fondo era un niño que tenía un diagnóstico de vida súper cortito, expectativas de vida súper cortitas. Era súper difícil que tuviera conexión, que hablara, que se conectara con nosotros. No tenía ninguna expectativa intelectual, ninguna expectativa de caminar, incluso de moverse súper poco”, explicó Rodríguez hace tres años.

Además, en ese momento, contó que “lo recuerdo a mil. Cuando se reía conmigo. Yo le hacía tonteras, todo, porque lo que pasa es que nunca sabíamos si conectaba o no conectaba. Pero con el tiempo descubrimos que conectaba”.

“Yo tengo en mi memoria guardado, atesorado para siempre, cuando Susana me dice ‘tenemos que soltarlo, yo lo voy a soltar… Tenemos que soltarlo’. Y Pablito falleció semanas después”, lamentó.