Nano Calderón retomó completamente el control sobre su vida ysus redes sociales, después de que el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago le concedió la libertad vigilada intensiva por acuchillar a su padre Hernán Calderón Salinas en agosto pasado.

El hijo de Raquel Argandoña ha vuelto a sus andanzas, reencontrándose con su polola Rebeca Naranjoy retomando su pasión por los automóviles, además de reunirse con amistades que no había visto por meses.

Es así que ahora se sumó a una de las últimas tendencias de Instagram, conla que los usuarios están compartiendo imágenes de las galerías de sus teléfonos por medio de las historias a petición de sus seguidores.

Fue así que Nano Calderón fue revelando capturas privadas de sus vehículos y otras circunstancias. Su primera moto, su primer auto, “zorreando en la nae”, la primera imagen de su galería, uno que otro momento en Aruba, también otras con Rebeca.

Pero también recordó su segundo vehículo. En 2016, para el cumpleaños número 18 del hermano de Kel Calderón, su padre y víctimaHernán Calderón Salinas, le regalóun Chevrolet Camaro de flamante color rojo, que en ese entonces contaba con un avalúo de30 millones de pesos.

Y al mismo tiempo, le pidieron un recuerdo de su primer accidente automovilístico, el que ocurrió hace 4 años. En la que elChevrolet Camarorojo aparece completamente destruido, con fierros atravesados, los neumáticos dados vuelta, el parabrisa quebrado y el capot levantado. La máquina está completamente deformada por el violento incidente.

Según la versión que entregó Calderón Salinas, el accidente ocurrió luego que a su hijo se le corriera un lente de contacto y perdiera el control del auto.

También aprovechó la instancia para lucir el antes y el después de su actual “Yellow Demon”.

El auto de Nano Calderón que le regaló su padre en 2016.
El accidente que sufrió Nano Calderón poco después.
El antes y el después del “Yellow Demon” de Nano Calderón.