Carabineros pidió investigar la Dirección de Inteligencia Policial de Carabineros (Dipolcar), luego que este martes el medio Interferencia publicara un reportaje donde se daba cuenta de una presunta estrategia del organismo para “socavar” al gobierno del Presidente Gabriel Boric.

La investigación periodística encendió las alarmas al interior de Carabineros ante las graves acusaciones en contra del general Luigi Lopresti, director de la Dipolcar, por ello pidieron al organismo de inteligencia poner todos los antecedentes a disposición del Ministerio Público, para que se inicien las indagatorias judiciales correspondientes.

Según comentó el director de Orden y Seguridad de Carabineros, Marcelo Araya, la medida se tomó por orden del director general, Ricardo Yáñez, con el fin que se “proporcione y facilite la totalidad de los antecedentes necesarios para que sea precisamente el ente persecutor quien establezca todo lo que se señala en ese manifiesto”.

El solicitar la apertura de una investigación se hace, “principalmente por un tema de transparencia, certeza, celeridad y que sea un órgano externo quien investigue”, comentó el director de Orden y Seguridad.

Paralelamente, el Partido Socialista también pidió iniciar una investigación a la institución, con el fin de aclarar la presunta participación del general Lopresti en los hechos que se le acusan.

La estabilidad institucional del país excluye absolutamente la utilización de los organismos policiales con fines de política contingente, y menos aún para afectar la buena marcha del Gobierno, y en particular, las actividades del presidente de la República, en su doble condición de jefe de Estado y de Gobierno”, señaló el PS por medio de una declaración pública.

Lopresti tratando de “socavar” al Gobierno

La investigación periodística de Interferencia señala que la Dipolcar a cargo del general Lopresti estaría implementando una supuesta “estrategia silenciosa”, tratando de aumentar la percepción de ingobernabilidad.

Según aseguró una fuente policial a dicho medio, “la estrategia del general Lopresti es aumentar la percepción de ingobernabilidad y para ello su táctica es dejar de hacer, ocultar informes, relajar la guardia, una suerte de huelga de brazos caídos en temas sensibles”.

El reportaje sostiene que, producto de dicha “estrategia”, la Dipolcar estaría entregando informes de inteligencia policial incompletos a las autoridades; suspendió la vigilancia secreta a los domicilios del Presidente Gabriel Boric y la Ministra del Interior, Izkia Siches; y estaría entregando información clave a la oposición, particularmente a ex autoridades del Ministerio del Interior de Sebastián Piñera.

Todo esto, con el fin de combatir a los denominados “enemigos morales y políticos” del general Lopresti, general que, además, fue el encargado de espiar al propio Presidente Boric y los ministros Giorgio Jackson y Camila Vallejo, mientras estos eran líderes estudiantiles, en medio de las protestas del 2011.