El fútbol chileno atraviesa uno de sus peores momentos en años. La Roja sigue última en las Eliminatorias tras el triste empate 0-0 con Ecuador y la clasificación al Mundial de 2026 parece un sueño lejano.
Pero mientras la hinchada se agarra la cabeza y los jugadores intentan encontrar respuestas en la cancha, el presidente de la ANFP, Pablo Milad, está ocupado en otra cosa: su rol en la Conmebol.
La Roja colista y con la calculadora en la mano
Con apenas los mismos puntos que Perú (pero peor diferencia de gol), Chile está en el fondo de la tabla. El repechaje está a 5 puntos de distancia y, para peor, Venezuela —que ocupa ese séptimo lugar— enfrenta a Bolivia en la próxima fecha.
En otras palabras, si todo sigue la lógica, la Roja podría quedar a 8 puntos de la zona de clasificación con solo 9 en juego. O sea, prácticamente eliminada.
Milad busca en brillar en la Conmebol
En medio de esta crisis y con Ricardo Gareca a nada de irse, Milad viajó a Paraguay para participar en una reunión de la Conmebol sobre racismo y violencia en el fútbol.
Sin duda, un tema importante. Pero con la Roja al borde del abismo, la pregunta es inevitable: ¿es este el momento adecuado para enfocarse en estas citas diplomáticas?
Mientras la presión crece y el futuro del fútbol chileno se tambalea, la imagen de un Milad metido en reuniones de la Conmebol en vez de estar de cabeza en la crisis de la Roja no hace más que encender las críticas. ¿Prioridades desordenadas o simple desconexión?