Alejandro Garnacho es talento puro, pero también tiene un carácter explosivo. Lo dejó claro en el último partido del Manchester United, donde protagonizó una escena que no pasó desapercibida.
Su molestia tras ser sustituido antes del descanso generó ruido dentro y fuera de la cancha, y el club decidió tomar cartas en el asunto.
El berrinche de Garnacho que lo puso en la mira
Todo ocurrió en el partido contra el Ipswich Town. Con el United en aprietos tras la expulsión de Patrick Dorgu en el primer tiempo, el técnico Ruben Amorim optó por hacer cambios y decidió sacar a Garnacho.
La reacción del argentino fue inmediata: salió de la cancha visiblemente molesto, sin mirar al entrenador ni al banco de suplentes y se fue directo al vestuario.
El United responde con una solución inesperada
El club no dejó pasar el episodio. Pero en lugar de una sanción tradicional, optó por una medida distinta: Garnacho tiene que pagar una cena al equipo. No como un castigo, sino como una forma de reforzar la unidad del plantel.
“Fue gracioso porque al día siguiente vino a mi oficina. Hice algunas averiguaciones, fue al vestuario a cambiarse de ropa porque estaba mojado. Vio el partido, no en el banquillo, y al final del partido estuvo allí y se fue a casa”, aclaró Amorim.
“En un club grande como el Manchester United todo es importante y la percepción es importante. Va a pagar una cena para todo el equipo y eso es todo”, agregó.