Parece una obra de realismo mágico. Lo que sucede con el Avellino, club de la Serie C de Italia y los Papas, es verdaderamente una fantasía hecha realidad. Con la muerte de Francisco I se cumplió de nueva la tradición.
Ocurrió sólo dos días antes de la muerte de Francisco I. El Avellino, con Massimo Rastelli en la banca, consiguió el ascenso a la Serie B para la próxima temporada 2025-2026.
Penúltima fecha de la tercera categoría del fútbol italiano y el Avellino necesitaba de un triunfo para llegar con ventaja a la última jornada. Sin embargo, la derrota del Audace Cerignola, sumada a la victoria del propio Avellino ante el Sorrento de visita, permitió que este cuadro ascendiese.
Avellino cumplió con su tradición: asciende y Francisco I nos deja
Francisco I falleció el lunes, debido a un derrame cerebral que derivó en una posterior insuficiencia cardíaca irreversible. Hace un buen tiempo que la salud del papa pendía de un hilo.
Justo dos días antes, Avellino había consagrado su ascenso. Y no es la primera vez que logran esto y que, pronto, un papa muere. Ocurrió en 1958, cuando Pío XII falleció el mismo año del primer ascenso del equipo italiano a la Serie C. También pasó con Juan XXIII, que nos dejó en 1963, mismo año en que los Lupi volvieron a ascender a la C.
Año de la locura y único ascenso a la Serie A
El año 1978 fue una locura. Dos papas murieron, Pablo VI y Juan Pablo I, y Avellino consiguió ascender a la Serie A por primera, y única, vez en su historia.
Volvió a pasar con Juan Pablo II en 2005, cuando el cuadro de los Lobos venció al Napoli para subir a la Serie B. Y ojo, en 2013, pese a que no falleció ese año, Benedictino XVI dejó el papado y el Avellino… bueno, ascendió a la Serie B.