Colo Colo sufrió no solo con el resultado sino también con el arbitraje en su derrota por 1-2 ante Palestino. Los albos pudieron llegar al empate luego de un fuerte codazo de Cristian Suárez a Gabriel Costa en el área, pero pese a lo evidente de las imágenes el juez Fernando Véjar decidió no sancionar nada.

La situación generó un fuerte altercado entre los jugadores y el árbitro, quien repartió tarjetas contra el cacique. Expulsión a Gustavo Quinteros, amarillas para Maximiliano Falcón y el propio Costa, que con el rostro golpeado no entendía nada de lo que estaba pasando.

Luego de la polémica y la publicación del informe del encuentro, este lunes Jorge Osorio sacó la voz. El presidente de la Comisión de Árbitros explicó a través de un video, publicado por el periodista de ESPN Benjamín Bonhomme, que lo hecho por Véjar fue un error y que en realidad sí existió el penal.

El desempeño de Véjar en el Colo Colo – Palestino suma críticas hasta de la Comisión de Árbitros. Foto: Agencia Uno

El árbitro interpreta una acción propia de la disputa y permite seguir el juego. No obstante a esto, el VAR chequea y considera que hay elementos para potencial penal. Por lo tanto, lo invita a una revisión. Luego de eso el árbitro mantiene su decisión original de no penal“, comienza detallando.

Osorio entra de lleno en la postura de Véjar y recalca que se equivocó. “A juicio de la Comisión de Árbitros esta situación es una acción imprudente de parte del defensor y debió ser sancionado con tiro penal“.

El presidente de la Comisión de Árbitros no solo se queda ahí, sino que también asume que no estuvieron finos. “Hemos detectado que debemos mejorar en términos de entregar imágenes más aclaratorias al árbitro en el momento que esté en zona de revisión“.

Eso sí, cierra su comunicado enfatizando que “el VAR, en general, funciona. Hemos corregido 28 errores en situaciones cruciales en lo que va de temporada“.

Colo Colo no tiene mucho más que hacer. El partido ya se perdió, pero por lo menos se queda con la tranquilidad de que sus reclamos tenían sustento no solo en lo evidente, sino también en el reglamento.