Un lindo gesto es el que tiene Claudio Bravo con los arqueros amateurs de Chile, al preparar clínicas para transmitirle sus conocimientos en su gira de despedida del fútbol.

Hace algunos días estuvo en Chillán, ciudad en la que se mostró muy cómodo. “Agradecer que pueda ayudar a estos pequeños que quieren ser alguien en la vida. Queremos colaborar, contribuir, que todos tengan acceso a lo que no pudo nuestra generación. Quiero entregar mi conocimiento, no recibir reconocimiento”, señaló el ex capitán de la selección chilena.

Los conocimientos que traspasa Claudio Bravo

A sus 42 años, Claudio Bravo aseguró en la práctica que “vamos a intentar corregir, mejorar ciertas cosas. De eso se trata, sería un error de parte nuestra decirles que todo lo hacen bien, fomentarles algo que no es así”.

Y paternalmente explicó que “si les corregimos cosas, no se sientan mal por nada del mundo. Es para mejorar. En dos horas algo les podemos dejar. Pásenlo más que bien”.

En primer punto, señala que para estar en el arco se necesita una gran mentalidad. “Qué hay que desarrollar para poder jugar ahí (en el arco): personalidad”, estableció.

“Lamentablemente el que no tiene personalidad y no quiera dar un paso adelante en personalidad, la va a tener complicada y el nivel lo tendrá acá (bajo). En cambio si desarrolla algo tan simple como la personalidad, pasará de aquí a aquí (hace un gesto de subir con su mano derecha)”, dijo Bravo.

Luego fue por otro asunto mental. “La actitud es importante, es algo fundamental. Yo jamás tuve una cancha como esta, ni guantes como los que usan. No tuve nada, pero me saqué la cresta, más que los 10 mil que querían ser arqueros”, les enseñó.

“Todos saltábamos lo mismo, corríamos lo mismo, algunos tenían mejores guantes, mejores zapatos, pero hay una cualidad que te hace diferente al resto: la mentalidad. Entonces para destacar por sobre el resto, hay que desarrollar la cabeza”, les dijo.

Bravo por eso señala que “mi consejo es que se saque la mugre, día tras días y cuando le va bien, al otro día hacer lo mismo. Si le va mal, lo mismo. Lo hice desde los 10 años hasta hoy”.

En la parte técnica, les indican a los porteros que usen la voz cuando van a cortar un centro. “Grite un par de segundos antes de tomar la pelota, porque así el delantero no va a querer que le pegue el viaje“, enseña.

“Cuando ya la tomó no vale. Saltó bien, la tomó bien, pero si no comunica cuando debe hacerlo un delantero lo va a chocar o le tocarán el balón y será gol. Será culpa suya y se sentirá mal”, sostiene Bravo.

Finalmente cuenta que bajo los tres palos “debe buscar soltarse, relajarse para ser mejor arquero. Le harán menos goles. Hay que soltarse, no estar tan tenso, soltar los hombros, los brazos, las muñecas. Y respirar. Debes disfrutar las acciones, los arqueros no tienen tantas por partido. No se puede estar tenso, así se sufre. El secreto es disfrutar”.