A mediados de febrero se conocieron detalles de Sergio Jadue y su vida en Miami como testigo protegido del FBI en medio de las investigaciones del FIFA Gate, tras destaparse la corrupción y crimen organizado en el que incurrían los altos directivos del fútbol planetario.
Este martes Chilevisión emitió en extenso la entrevista realizada a María Inés Facuse, la ex esposa de Jadue, y quien partió a Estados Unidos junto al calerano tras estallar la olla a presión en la ANFP durante noviembre de 2015.
En la entrevista, Facuse entregó nuevos detalles y confirmó que ya no está con Jadue por violencia intrafamiliar, sumado a que el calerano no está respondiendo económicamente por su hija.
“Hace seis meses que no me da ni para mi hija, ni para mí. Ahí me solicita el divorcio. He tenido que trabajar en mil cosas: en McDonald’s, haciendo aseo, después jardines en casas, en decoración. Gracias a Dios conocí a una familia chilena que me ha ayudado mucho, me han sacado adelante dándome ánimo. Muchas veces no he tenido qué comer”, dijo Facuse.
Agregó que “hay días en que ni siquiera he tenido para comprarle un helado a mi hija. Mo volvería jamás con él, prefiero trabajar toda mi vida en un McDonald’s, pero no voy a volver”.
En la previa de las elecciones de la ANFP en 2011, La Cuarta reveló que Jadue tenía antecedentes por violencia intrafamiliar, hecho que se fue desvaneciendo con el correr del tiempo y la elección del ex directivo como presidente de Quilín. La mujer confirma los hechos.
“Él me juró que no lo iba a hacer nunca más. Acá en Miami volvió a ocurrir un episodio… A lo mejor un te duele y listo. Pero estar todos los días y que te digan que no sirves para nada, que todo está mal. Es la segunda oportunidad que le dio la vida, pudiendo estar preso, y no la aprovechó. ‘Ándate a pedir plata a la calle. Antes comías lomito conmigo y ahora vas a comer chicharrones’. Así me gritó, saliendo de la audiencia con el juez”, expuso.
Sentencia: “cuando pasó todo creo que fue la mejor opción. Luchar por la familia siempre es bueno y no me arrepiento. Pero él se volvió egoísta, egocéntrico y poco preocupado de su familia”.