Uno de los grandes desafíos de Universidad de Chile cada año es romper la 'maldición' en el Estadio Monumental. Los azules no vencen al Cacique en la Ruca desde 2001 y desde 2013 en el Nacional.

Uno que supo ganar en clásicos y ser figura para los azules fue Pedro González. El Heidi cree que a la U le "falta convicción, querer ganar. Pasa más por eso que por otra cosa. Nosotros íbamos en el Monumental y ya en el calentamiento estábamos convencidos de que nos íbamos a quedar con ese partido".

"Hay un clásico en el Monumental donde expulsaron a Esteban Valencia y Luis Musrri e íbamos un gol abajo. Y logramos empatarlo. Fue un triunfo porque teníamos el partido prácticamente perdido", señaló en conversación con Diego Rivarola por Instagram Live.

Pedro González marcó 121 goles en 219 partidos en Universidad de Chile, ganando un Bicampeonato (99-00) y dos Copa Chile

Pedro González marcó 121 goles en 219 partidos en Universidad de Chile, ganando un Bicampeonato (99-00) y dos Copa Chile

Sobre las razones de la supremacía alba en los clásicos, el Heidi señaló que "han sido circunstancias nomás. Pero estando en este equipo y en un Clásico, los rivales juegan para ir a matar. No se ha dado, pero espero que volvamos a ganar rápido en el Monumental".

En esa misma línea, González recordó su mejor gol en un Superclásico: "El mejor fue el que le hago a Marcelo Ramírez en el Estadio Nacional. Cuando uno lo hace en el momento no dimensiona la calidad de las anotaciones, pero cuando lo ve por televisión se pregunta ¿yo hice eso?. Ves cómo quedó pasado el ‘Pistola’ Flores, cómo quedó tirado el ‘Rambo’".

"En ese momento, le pico la diagonal a un central, por el otro costado venía a marcar Francisco Rojas y yo estaba preocupado de él, no del portero. Cuando Ramírez sale, me facilita la jugada. En la televisión uno lo ve diferente", recordó el valdiviano del encuentro del 17 de junio del año 2000, donde la “U” se impuso 3-0 a su archirrival.

Por último, el Heidi confesó por qué no jugó un tiempo más para superar el récord de Chamaco Valdés: "Ya tenía 39 años. Ya era difícil. Costaba entrenar, y preferí dar un paso al costado y lo hice conforme. Igual quedó la espinita de superar el récord, pero estoy feliz con lo que logré".