Universidad de Chile se prepara para la temporada 2023 con Mauricio Pellegrino en la dirección técnica. Los azules están obligados a dejar atrás las temporadas consecutivas peleando por no descender, pero todo indica que el entrenador aún no está conforme con las incorporaciones y el plantel.
La U ya sumó a Juan Pablo Gómez, Leandro Fernández, Federico Mateos, Matías Zaldivia, Nicolás Guerra y Cristopher Toselli. Pellegrino aún espera otra incorporación como refuerzo, al menos un lateral izquierdo o derecho.
"Estamos haciendo pruebas en los laterales, tanto derecho como izquierdo, pero estamos en construcción. (…) Hasta que cierre el libro de pases, si hay una posibilidad de mejorar el equipo estaremos atentos a eso. Teníamos urgencias, las que atacamos primero, pero también hay que ver cómo está el club económicamente, con el presupuesto justo”, dijo Pellegrino hace unos días.
Agregó que “tenemos que usar el ingenio para ver si se puede mejorar alguna u otra posición, nada en concreto. Debemos ver si las condiciones se dan. Si es un jugador a préstamo o libre, estamos abiertos. Es difícil que el club pueda pagar un traspaso, es la realidad de la institución”.
Así las cosas el hincha azul se puede poner a pensar en refuerzos de los últimos años que incluso no rindieron, pero que por cartel los fanáticos del Chuncho recibirían con los brazos abiertos.
Caso aparte es Ramón Arias. Cachila llegó a principios de 2021 a la U y afirmó la defensa azul más allá de errores en la defensa de un plantel complicado con los resultados. Incluso anotó los dos goles de la remontada ante La Calera que salvaron al Chuncho del descenso.
En 2020 se gestaron dos llegadas que terminaron en dolorosas salidas: Walter Montillo y Joaquín Larrivey. La Ardilla, ídolo de los azules, no fue renovada y terminó retirándose. Al delantero tampoco le extendieron contrato y los azules vieron partir a su goleador al Cosenza de Italia.
Pablo Parra pasó sin pena ni gloria por la U en 2019. El mediocampista llegó proveniente de Cobreloa y volvió a los naranjas en 2020. Posteriormente incluso fue considerado ocasionalmente en la selección chilena. Hoy está en Puebla y seguramente no le vendría mal a Universidad de Chile.
A medidos de 2019 regresó Osvaldo González y Leonardo Fernández, una joven promesa uruguaya que cuando empezaba a destacar en cosa de meses debió partir por el término del préstamo.
En 2018 sucedió algo parecido con Ángelo Araos, que arribó desde Deportes Antofagasta y cuando los hinchas empezaban a disfrutarlo se fue a Corinthians, perdiéndose en el fútbol brasileño. Ese mismo año Gonzalo Espinoza reforzó a la U en su segundo regreso al Chuncho.
¿Y si llegara Felipe Mora a Universidad de Chile? En 2017 el delantero fue fichaje como flamante refuerzo, pero también duró poco antes de partir a Cruz Azul. También arribaba Christian Vilches en un buen momento pese a ser resistido por su pasado en Colo Colo, y David Pizarro. En 2016 sumaron al entonces reciente bicampeón de América, Gonzalo Jara. También cumplió un paso fugaz Gastón Fernández, La Gata; y Lorenzo Reyes
Incluso en 2014 los azules se reforzaron, entre otros, con los seleccionados uruguayos Mathías Corujo y Guzmán Pereira. Seguramente hoy los fanáticos azules esperan que el Chuncho encuentre un refuerzo de la talla de estos nombres en calidad y cartel.
