Desde que Kika Silva perdió a su cerdita Roxy, que vivió junto a ellaentre marzo y junio de 2017, su vida cambió. Tras la muerte de su mascota, la modelo creó una fundación animalista bautizándola con el nombre de la chanchita. Recientemente, anunció quefirmó en la notaría la constitución de la personalidad jurídica.
“Soy la presidenta de la fundación,siempre fue un sueño formarla legalmente. No me había atrevido antes, no me sentía capaz, encontraba que era mucha responsabilidad”, indicó en conversacióncon LUN.
La ex rostro televisivo señaló que“estableciéndonos legalmente podemos abarcar mucho más. Eso significa tener capital, generar más ayuda, tener un equipo de trabajo, educar mejor y empezar a trabajar en proyectos”.
Según planteó, “la idea de todo esto es poder generar educación, hablar sobre tenencia responsable, esterilización, generar adopciones, ayudar a diferentes organizaciones o personas que también están en esto,todo para crear una plataforma para contribuir con nuestro fin último que son los animales“.
Asimismo, la reina del Festival de Viña en 2017, aseguró que haber tenido a su cerdita Roxy fue el gran impulso que la motivó a crear la organización.
“Ella generó un cambio muy grande en mí respecto a la cercanía que tenía con los animales, sobre el respeto y muchas cosas que antes no eran de mi interés. Cuando llegó ella empecé a entender muchas cosas que eran necesarias”, expresó.
“Es un gran desafío para mí, siento que tengo un montón por aprender. Mi plan es seguir avanzando, seguir ayudando, seguir aprendiendo. Creo que el tema de la educación es fundamental. Tenemos que saber más sobre tenencia responsable y enseñar. Dedicar mi tiempo a esto me pone muy contenta”, finalizó.