El conductor de “Contigo en la Mañana” Julio César Rodríguez, tuvo duras palabras para referirse a los argumentos que entregó el fiscal jefe de Arauco, José Ortiz, para de cierta manera explicar por qué aún no hay resultados en el caso de la desaparición de Tomás Bravo en Caripilún, Región del Bío Bío.

Justo después de que se declarara la reserva de la investigación por 40 días, el miércoles Ortiz sostuvo que “esa reserva tiene por sentido tratar de suplir lo malo que recibimos.La buena fe y solidaridad de la gente, que fue multitudinaria el primer día de búsqueda, lamentablemente destrozó el sitio del suceso“.

“Nosotros tomamos conocimiento a las 02:00 horas del día siguiente. Desaparece Tomás el miércoles 17. Se dispuso de inmediato la concurrencia de las policías. El sitio del suceso estaba absolutamente alterado. Tomamos un sitio del suceso 100% alterado por más de mil personas que entraron desesperadamente a buscar al menor. Eso, más la lluvia del día siguiente“, añadió el fiscal.

Es por eso que este viernes, repasando todos los sucesos del caso a una semana de la desaparición, Rodríguez comentó “llaman bastante la atención las declaraciones del fiscal, porque las imágenes que hemos visto han sido de un sitio bien destrozado antes ya por la explotación forestal. No es un sitio fácil para buscar. No sé si la gente, los rescatistas, querían encontrar las huellas de Tomás, hacia a dónde había ido, de manera expuesta ahí… ‘ah, mire. Por aquí se fue caminando hasta este lugar’, es bien difícil eso. No me cuadra con la realidad del sector”

“Claro que se buscó. Se hizo la búsqueda de un niño perdido, no de un acontecimiento policial. La desesperación del momento de encontrar a un niño es bien relativo esto de…”, continuó Julio César.

Pero entonces lo interrumpió Francisco Sanfurgo, el periodista del matinal que se encuentra en el lugar, para explicar que “él [fiscal] constataba una realidad, no culpaba gente. Lo primero que dice es que, en efecto, entiende la solidaridad y todo, pero explicaba por qué ha sido difícil esta investigación. Porque, claro, yo me podría parar acá con algo recién ocurrido y quizás no entiendo nada, pero él decía ‘se pueden pillar huellas, un trozo de tela de la ropa, los perros pueden sentir el aroma si es que no está contaminado…'”.

Rodríguez reaccionó nuevamente: “mi punto es otro. Qué niño que se pierde no es buscado antes por gente. Por la familia, por los amigos. A ti no se te pierde un niño de cuatro años, en el campo, en la playa, en algún lugar, y tú dejas todo intacto, que nadie se mueva, porque voy a llamar a la Fiscalía“.

“Eso no ocurre. La gente empieza a pisar, a moverse, a buscar, a llamarlo, a llamar a la familia, los amigos, los tíos. O sea, es una situación normal. Partir de la base ‘oye, esto está destrozado porque buscaron’, me parece a mí -esto es una opinión, ah- me parece a mí que es un antecedente extraño. Porque no es un crimen“.

“Si había un cuerpo, un crimen, y se contamina el lugar, sí, estamos hablando de un hecho gravísimo. Pero estamos hablando de una situación que ocurre con la mayoría de las personas extraviadas: que la gente, lo primero, es que lo parte a buscar. Llegan los Bomberos, llegan los amigos, llega más familia”.

“Encuentro que es un argumento que, para que sea esencial o que para que de cuenta de que no hay resultados, que yo lo encuentro frágil”, sentenció.