La semana pasada se informaba del peligroso aumento de radiación que se estaba viviendo en Chernóbil producto de los incendios forestales que hay en la zona.
Esta zona de Ucrania fue protagonista de uno de los desastres nucleares más graves en la historia de la humanidad en 1986 y hoy nuevamente está en la mira del mundo.
Lo complejo de estos incendios forestales es que no han podido ser controlados y se encuentran a sólo dos kilómetros de los depósitos de residuos radiactivos, según informó el sitio RT Actualidad.
Los depósitos de residuos radiactivos son verdaderos cementerios nucleares en los que se guardan los compuestos que estuvieron expuestos a una alta radiación y que siguen siendo un peligro.
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