Matías Almeyda está pronto a asumir la dirección técnica selección chilena con el currículum de los títulos conseguidos con River Plate y Banfield en el ascenso del fútbol argentino, más dos Copas MX, una Supercopa MX y una Liga MX levantadas entre 2015 y 2017 con las Chivas de Guadalajara en México.

Y como muchos, el Pelados luce tatuajes en su piel con distintas historias, aunque tampoco es que tenga todo el cuerpo cubierto de tinta. Sobre su pecho luce los nombres de sus tres hijas: Azul, Sofía y Selena.

En el brazo derecho tiene grabado un indígena con un cintillo albiceleste, mientras en la extremidad superior izquierda lo acompaña un Jesucristo.

Y así como prometió hacerse el tatuaje de River Plate tras el ascenso y regreso a la Primera División como director técnico del Millo, Almeyda se tatuó el trofeo del fútbol mexicano tras alcanzar el título con las Chivas en el Clausura 2017 frente a los Tigres UANL. Y el hecho trajo polémica.

“Mañana me tatúo el escudo de Chivas. Es un escudo que me queda por siempre. Están siempre en mi corazón y ahora estarán en mi piel”, sostuvo entonces Almeyda tras ganar el título en México.

Y el técnico cumplió entre comillas, pero muchos no quedaron conformes. Almeyda se tatuó en la zona del tríceps izquierdo la copa y las doce estrellas de Chivas, junto a la fecha de consecución del título. Algunos esperaban que cumpliera al pie de la letra sus palabras.