La situación del coronavirus está lejos de ser controlada en el mundo entero y, pese a todos los esfuerzos, el mundo del fútbol nuevamente se ha visto golpeado.
Este martes, el West Ham vivió un episodio que tiene en alerta al fútbol inglés luego que se confirmara que tres integrantes del plantel dieran positivo al Covid-19. ¿El gran problema? Los involucrados estaban a punto de salir a la cancha para el duelo ante el Hull City por la Copa de la Liga.
Justo cuando el equipo esperaba para salir al calentamiento, el cuerpo médico fue notificado de la situación. El técnico David Moyes, junto a sus jugadores, Issa Diop y Josh Cullen, son las personas contagiadas.
El hecho llevó a que el club inmediatamente los trasladara desde el Estadio Olímpico de Londres hasta sus hogares para que comiencen con la cuarentena preventiva, mientras el resto del equipo salió a disputar el encuentro.
El club emitió un comunicado en pleno partido explicando lo sucedido y señalando que el duelo ante el Hull City se llevó a cabo dada sus estrictas medidas sanitarias para evitar contagios. Queda saber ahora qué pasará con los que salieron a la cancha, quienes podrían generar una ola de contagios en el elenco rival si tuvieron contacto estrecho con sus colegas.
