En la penúltima temporada de su carrera, Ronaldinho jugó en el Queretaro de México ( 2014-2015)  y donde fue compañero del chileno Patricio Rubio.

Ambos jugadores hicieron una linda amistad y de hecho en la exhibición que se suspendió en octubre de 2019 a causa del estallido social, el brasileño puso como exigencia la presencia del actual delanteo de Everton de Viña del Mar.

El Pato, invitado al programa Peloteros TV contó una gran anécdota sobre el brasileño. "Jugábamos los viernes de local siempre, en México cada equipo tiene su horario de local por todo el Torneo. El Negro terminaba el partido, tomaba el charter y se iba a Cancún, Playa del Carmén", aseguró.

Agregando que "volvía los martes, el lunes nunca entrenaba, un crack".

El paso del ídolo brasileño por el fútbol mexicano no fue tan malo, al convertir ocho goles en 25 jugados disputados.