Claudio Bravo volvió a sentirse importante en el Real Betis, luego de un paso para el olvido en el Manchester City. El arquero chileno es uno de los baluartes de Manuel Pellegrini y ha sido frecuentemente destacado por la prensa española.
En diálogo con Agricultura, explicó por qué aceptó jugar en el Betis: “No pretendía mover a mi familia por un año. Nos queríamos sentir estables, que mi familia se adaptara. Estar un año es instalarse y hacer las maletas para un nuevo destino, no es lo que yo quiero para mi familia, no es lo que me gusta. Quiero terminar de jugar sintiéndome lo más útil posible. Tengo 38 años, no sé si la genética me beneficia pero me siento como si tuviera 28. Siempre he vivido para mi trabajo y eso me ha ayudado a competir a esta edad en este nivel”.
Sobre su campaña junto al equipo sevillano, destacó: “Está siendo una temporada buena. Cuando vine al Betis sabía la esencia del club, la sensación del ambiente que se genera afuera, donde la presión es grande. El aficionado está muy encima para lo bueno y para lo malo. Quería disfrutar de estos últimos años en actividad en un lugar donde haya mucha pasión, no quería sentirme plano, no sentir nada a la hora de competir. Más ahora en pandemia. Y mira cómo funcionó todo, hace una temporada la pelea era por no descender. Queríamos meter al Betis donde debe estar, es un club grande, con grandes jugadores, una afición tremenda y debe estar donde estamos hoy”.
“Junto con el Mónaco somos los equipos que menos hemos perdido. Es llamativo, quitando los equipos poderosos que son los que mejor se refuerzan. Eso demuestra cómo estamos trabajando, lo que está haciendo Manuel (Pellegrini) en el club es para destacar”, añadió.

Bravo con la camiseta del Betis (Getty)
Bravo reiteró que quiere convertirse en director técnico cuando se retire del fútbol y en este contexto valora estar aprendiendo de su compatriota Manuel Pellegrini.
“Una de las razones por las que vine es porque Manuel vino al club. Quiero aprender de los grandes técnicos, por qué no seguir ese camino de ser dirigido por técnicos que me siguen enseñando. Estoy en una etapa donde quiero seguir aprendiendo, mejorar cosas para mañana y por qué no llegar a ser técnico. Para eso debo estar con gente como Manuel, exitosa, distinta al resto, por algo ha estado en clubes poderosos, ha tenido éxitos que difícilmente pueda tener un técnico chileno”.
“Es complejo. Los que hemos estado en este nivel y hemos llegado al éxito en grandes clubes sabemos que desde Chile cuesta mucho llegar y mantenerse. Me he llevado una sorpresa mayúscula al ver la clase de persona que es y te muestra por qué son exitosos. No lo conocía, nos habíamos enfrentado pero más allá de hablar 15 segundos no tuvimos más acercamiento como ahora. Espero poder seguir ayudándole”, afirmó.
Finalmente, comenta que le gustaría comenzar su carrera de DT en las divisiones menores: “Hay que ir quemando etapas paso a paso. Sería egoísta no traspasar todo lo que aprendí a los más pequeños. Ahí quiero destinar parte de mi tiempo a futuro, entregarle algo a las nuevas generaciones, abrirles los ojos, inculcar que es posible independiente de dónde venga, de las herramientas. Ahí hay que devolver un poco”.
“Luego quizás me aventuraré a un primer equipo o selección, se irán quemando etapas. Ahora disfruto del Betis, de mi período en la selección que no durará para siempre. Después disfrutaré afuera ya sea de entrenador, en una gerencia deportiva o donde pueda colaborar”, finalizó.