Gerard Piqué salió a dar la cara luego de la filtración de audios del Diario El Confidencial, en el que el futbolista del Barcelona hablaba con el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, sobre la planificación del nuevo formato de la Supercopa de España junto a la empresa del defensor, Kosmos.

Básicamente, el jugador fue nexo entre Arabia Saudita y el ente para trasladar allí la competición. "Tenemos muy buenas conexiones en Oriente Medio y la gente de Arabia Saudí nos comentó que quería traer competiciones oficiales de fútbol a su país. Hablamos con el señor Rubiales para ver si podían mover la Supercopa fuera de España. También les propusimos cambiar el formato. Al presidente le gustó la idea y creo que visto en perspectiva, ha sido un éxito rotundo", dijo en su canal de Twitch, donde atendió a los medios.

El campeón del mundo en Sudáfrica 2010 siguió con su explicación. "Estamos hablando de una cosa legal. Podemos debatir sobre la moralidad del hecho, pero lo único ilegal en este asunto es la filtración de los audios. En 2019 ya se sabía la existencia de la comisión para Kosmos. Quiero dar la cara porque no tengo nada que esconder. Estoy muy orgulloso del trabajo que hemos hecho en Kosmos", puntualizó.

"No pensé que todo esto iba a crear todo el revuelvo que se ha creado. No es que se hiciera a escondidas: se pasaron por todos los pasos que tocaban. Hay muchos acuerdos que no se explican públicamente. En 2019 sale la noticia y la gente lo sabía. No entiendo el revuelo. Se cumplieron todos los procedimientos: en la asamblea de la RFEF hay gente que representa a todos los clubes", añadió.

El momento más tenso de la transmisión de Piqué en su Twitch fue cuando las preguntas las hizo el periodista Juanma Castaño, en donde ambos tuvieron un tremendo encontronazo cuando el reportero le preguntó si este acuerdo comercial iba a afectar la competición pues podría favorecer a Barcelona.