Un verdadero papelón se vivió esta tarde en la Copa Sudamericana. El duelo entre Audax y Ñublense, tras casi tres horas de espera, terminó por suspenderse debido a la copiosa lluvia que cayó sobre el Ester Roa Rebolledo. Un duelo, que de inicio, nunca debió jugarse en Concepción.

Y es que los itálicos querían jugar en Santiago, sin embargo el alto costo que le puso Colo Colo para arrendar el Monumental (75 millones), sumado a que Santa Laura no cuenta con los requisitos de la Conmebol para albergar este tipo de partidos, obligaron al club a ceder en su idea y partir a tierras penquistas, donde solo le cobraron 5 millones de pesos.

Así las cosas y con pronóstico en contra, terminaron por intentar jugarlo, pero era imposible. El campo de juego lucía completamente inundado y aunque el árbitro del partido salió en varias ocasiones a realizar la inspección, la situación nunca mejoró y solo parecía empeorar.

Para la Conmebol se trata de un verdadero problema, ya que esto implica que el partido debía moverse a una fecha cercana, por toda la logística que implica este partido, además de las delegaciones de árbitros. Por lo que, en una decisión de emergencia, terminaron por mover el partido a Rancagua, al estadio El Teniente, donde se jugará sin público el partido.

Inicialmente, el estadio de O’Higgins no fue considerado por Audax ya que no cumple con los requisitos Conmebol para esta fase de la Copa Sudamericana. Pero el ente continental decidió hacer vista gorda de esa reglamentación y en vista de las pocas posibilidades, jugar ahí.

¿Y si llueve?

Hasta ahí todo bien. Salvo el papelón, ya el partido tiene fecha y hora para jugarse. Será este viernes a las 18 horas. Sin embargo, existe otro problema. Para la zona central está pronosticado un frente de mal tiempo para este fin de semana, por lo que perfectamente podría darse que se repita el problema.

En Rancagua están pronosticadas lluvias desde las 2 de la tarde y se espera que no paren en casi todo el fin de semana. En la Conmebol tienen esperanzas de que eso no afecte el desarrollo del partido, ya que en ese caso, difícilmente cuentan con un Plan C para el postergado Audax-Ñublense.