La Roja por fin salió del pozo. La selección chilena goleó a Venezuela para escapar del fondo de las Eliminatorias y volver a ilusionarse con el Mundial 2026, donde quedan seis partidos para definir quiénes van a la Copa del Mundo y quién se queda con el cupo para el repechaje.
Una de las grandes figuras de esta fecha doble, que antes contó con un empate con Perú, fue Arturo Vidal. El King estaba fuera de la Roja por una decisión que parecía tallada en piedra, pero regresó para estos partidos luego de ser campeón con Colo Colo. ¿El resultado? Los primeros cuatro puntos de la era Ricardo Gareca.
El mediocampista no bajó los brazos en ningún momento y transmitió la necesitada ilusión al resto de la selección. Y sus compañeros no eran los únicos felices con su retorno. Además, hubo otros personajes del partido entre Chile y Venezuela que estaban felices con él: los árbitros.
Luego del pitazo final, la transmisión capturó el retiro de los jugadores de la cancha y su camino a los camarines. Pero antes de que Vidal pudiera llegar al vestidor de la Roja, fue detenido por alguien que estaba en el camarín de los árbitros. Le pidieron su pantalón y éste, feliz, accedió.
La alegría de Vidal tras el triunfo de Chile sobre Venezuela
Tras el triunfo sobre Venezuela, Arturo Vidal dejó ver su alegría y comentó: “Necesitábamos mucho este triunfo, por todo, por volver a creer y pensar que se puede ir al Mundial. Hay que disfrutarlo y prepararse bien para el próximo año, que vienen partidos muy duros”.
Además, destacó que la relación con Ricardo Gareca, a quien criticó duramente, está en perfectas condiciones. “Con el profe hablamos el primer día, dejamos las cosas claras. Cuando hay dos personas que quieren lo mismo, uno se arregla súper rápido. Valió la pena todo lo que hablamos”, dijo.
