La teleserie entre U. de Chile y Colo Colo por la acusación de desacato contra Jorge Almirón tuvo un abrupto desenlace. Finalmente, el TAS cerró el proceso luego de que los azules no hicieran los últimos trámites para perseverar en su denuncia, poniéndole fin, así, a una estirada polémica.

“El Apelante no ha presentado la Memoria de Apelación ni tampoco ha nombrado al árbitro dentro del plazo. La apelación se considera retirada, de conformidad con los Artículos R36 y R51 del Código”, resolvió el Tribunal de Arbitraje Deportivo.

Las explicaciones de Azul Azul fueron claras: querían un juicio abreviado y, como esto no pasó, desistieron. Lo dijo el presidente de la concesionaria, Michael Clark. Ahora salió a declarar José Ramón Correa, el abogado y director azul que fue la cara visible de la arremetida de la U contra Colo Colo.

Lo que buscábamos era un juicio abreviado y para ello se necesitaba acuerdo entre las partes, pero la ANFP -de manera legítima- decide no llegar a este entendimiento y entonces decidimos no prosperar, pues los costos del juicio largo superaban los 300 millones de pesos”, recalcó a La Tercera.

La denuncia de U. de Chile a Colo Colo terminó en nada | Photosport

Abogado de U. de Chile y el fracaso en el TAS

José Ramón Correa defendió la intención de U. de Chile de ir al TAS, pese a que la denuncia fue abandonada. “No hay arrepentimientos. Fuimos a buscar un juicio abreviado e hicimos todo lo posible por obtenerlo. Sin duda, como hincha, me hubiese encantado seguir con la acción legal“, dijo.

Pero como director de Azul Azul, mi deber es resguardar los recursos de la institución y creo que fue una buena decisión no prosperar para dejar ese dinero para las necesidades de la U“, añadió.

En ese sentido, aseguró que el mensaje al hincha de la U es “que estamos actuando razonablemente. Queríamos un juicio abreviado para resolver lo que seguimos pensando que es justo, acatar las reglas. Pero ante la legítima posición de la ANFP, solo nos quedaba proceder con la razón. No podíamos arriesgar el patrimonio del club o dejar al equipo sin refuerzos. Era el momento de dejar al lado las pasiones y créame no fue fácil“.

“Es correcto reclamar cuando no se están cumpliendo las reglas, pero la pasión no puede nublar la razón y se decidió actuar razonablemente: no nos podíamos gastar ese dinero y dejar de lado temas tan importantes como la contratación de refuerzos”, concluyó Correa.