Tras su sorprendente éxito en el Festival de Viña del Mar, donde fue una de las últimas artistas en confirmarse y que incluso fue jurado, Emilia Mernes tuvo su regreso a Chile este 19 de mayo.
Y es que desde Viña que la argentina demostró que tenía un gran grupo de fans a punta de varios hits que ha estrenado en el último tiempo desde que se presentó como solista hace 4 años.
Dulzura, mucho perreo y un éxito en las mujeres
Con un público que repletó la mitad del Movistar Arena dispuesto por la producción, y con Vesta Lugg sirviendo de telonera en un show de media hora, pasadas las 21:00 horas salió Emilia en medio de numerosos gritos de las fans.
Y es que en su mayoría mujeres y una que otra pareja, la argentina de 26 años casi no paró de cantar con hit tras hit ante una algarabía de la gente que hizo propia cada canción de la artista.
Recalienta fue el primer tema de la noche y que tuvo el recorrido por su álbum ¿Tú crees en mí?, pasando por varios éxitos y otras que han sido colaboraciones como Perreito Salvaje, Como si no importara que interpreta junto a su novio Duki, Rápido Lento, Intoxicao y BB; terminando la noche con la esperada Cuatro Veinte.
Además, la artista vivió emotivos momentos como cuando cantó su reciente tema con Miranda Uno los dos; o cuando interpretó Mi otra mitad, canción dedicada a una relación tóxica como ella misma se refirió en el escenario y que la dejó muy emocionada en el final.
Los momentos de ternura se vivieron cuando Emilia comenzó a leer diferentes carteles del público. Entre algunas locuras que realizó la argentina, le dibujó un tatuaje a una fan y también le cantó junto a toda la gente el cumpleaños a otra seguidora. Mientras que después subió a una joven del público a bailar con ella tras definirlo en un “Piedra, papel o tijera”.
Noche redonda en Santiago para Emilia, que en pocos años ha conseguido un tremendo éxito en las radios y plataformas de música con solo temazos; demostrando un show completo en el Movistar Arena, donde el perreo fue infaltable pero también los momentos románticos y dulces propios del carisma de la argentina junto a su juvenil fanaticada.