Lo que comenzó como una misión de corta duración a la Estación Espacial Internacional (EEI) para los astronautas Suni Williams y Butch Wilmore podría convertirse en una estadía mucho más prolongada de lo previsto.
Los dos astronautas, que despegaron de Florida el 5 de junio a bordo de la nave espacial Boeing Starliner, se encuentran ahora en medio de una compleja situación mientras la NASA y Boeing trabajan para resolver problemas con la cápsula espacial.
¿Qué pasó con los astronautas?
La misión original estaba programada para durar entre ocho y diez días. Sin embargo, sesenta y dos días después, Williams y Wilmore siguen a bordo de la EEI.
¿Cuándo volverían?
La NASA ha reconocido que está evaluando varias opciones para asegurar el regreso seguro de los astronautas a la Tierra, ya que los problemas técnicos persisten con la Starliner.
Una de las opciones más drásticas que se están considerando es que Williams y Wilmore permanezcan en el espacio hasta 2025.
Este plan implicaría cambios significativos en la próxima misión Crew Dragon de SpaceX, ya que en lugar de enviar a cuatro astronautas al espacio como estaba originalmente planeado para el 24 de septiembre, la misión podría reducir su tripulación a dos personas y permitir que Williams y Wilmore se unan para trabajar durante otros seis meses en la EEI antes de regresar a la Tierra en febrero de 2025.
La otra opción es regresar en el Starliner de Boeing. Si bien es una nave que ha enfrentado problemas técnicos con sus propulsores, Boeing sostiene que la nave sigue siendo segura para el retorno de los astronautas.
Ken Bowersox, representante de la NASA, comentó el 7 de agosto que: “Podríamos tomar cualquiera de los dos caminos. Y personas razonables podrían elegir cualquiera de los dos caminos”. La agencia aún no ha tomado una decisión definitiva, y la evaluación de la Starliner sigue en curso.
Los problemas del Starliner
El Starliner de Boeing es una cápsula espacial reutilizable diseñada para realizar hasta 10 misiones, con una capacidad usual para cuatro astronautas y un máximo de siete. Sin embargo, la nave ha enfrentado múltiples problemas desde su primer vuelo no tripulado en 2019, que fracasó en acoplarse con la EEI.
Tras varios años de pruebas y ajustes, la misión tripulada finalmente despegó en junio de 2023, aunque los problemas persisten.
Hasta ahora, se estima que Boeing ha perdido alrededor de 1.600 millones de dólares en el programa Starliner.