El pie de limón con galletas es una versión refrescante del clásico postre. Descubre cómo crearlo con pasos sencillos con esta receta e ingredientes comunes para sorprender a tus invitados con esta delicia casera.
Receta de pie de limón con galletas
- Porciones: 8
- Tiempo de preparación: 1 hora (incluyendo el tiempo de refrigeración)
Ingredientes
- 2 tazas de galletas tipo maría trituradas
- ½ taza de mantequilla derretida
- 1 lata de leche condensada
- 1 taza de jugo de limón recién exprimido
- 4 yemas de huevo
- 1 cucharadita de ralladura de limón (opcional)
- 3 claras de huevo
- ½ taza de azúcar
- ½ cucharadita de extracto de vainilla (opcional)
Preparación
- En un recipiente, mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida hasta lograr una textura arenosa.
- Presiona esta mezcla en el fondo de un molde para pastel, creando una base firme. Refrigera mientras preparas el relleno.
- En otro recipiente, mezcla la leche condensada, el jugo de limón y las yemas de huevo hasta obtener una mezcla homogénea. Agrega la ralladura de limón si deseas intensificar el sabor.
- Vierte la mezcla sobre la base de galletas en el molde.
- Refrigera el pie de limón hasta que esté firme.
- Para preparar el merengue, comienza batiendo las claras a baja velocidad hasta que comiencen a espumar. Puedes usar una batidora eléctrica o un batidor manual.
- Aumenta gradualmente la velocidad y continúa batiendo hasta que las claras formen picos suaves. En este punto, puedes agregar el extracto de vainilla.
- Con la batidora encendida, agrega el azúcar gradualmente, una cucharada a la vez. Bate entre cada adición para permitir que el azúcar se disuelva por completo. Continúa batiendo hasta que las claras formen picos firmes y brillantes.
- Para asegurarte de que el merengue esté listo, frota un poco entre tus dedos. Si no sientes granos de azúcar, significa que está bien batido. El merengue debe tener una textura suave y brillante.
- Una vez que el pie de limón esté refrigerado y firme, extiende el merengue sobre la superficie con una espátula, creando picos con la parte posterior de la cuchara para obtener un aspecto atractivo.
- Si tienes un soplete de cocina, puedes dorar ligeramente la parte superior del merengue para un toque final.