Es un hecho que pasamos gran parte del día en las redes sociales, al punto que lleva a ser adictivo.
¿Pero qué es lo que hace que te mantengas constantemente viendo las redes? La respuesta es simple, lo mismo que te hace estar sentado durante horas jugando en las tragamonedas: el famoso efecto bucle.
El fin de esto es mantenerte haciendo una y otra vez el mismo movimiento en la red, gracias a que cada cierto tiempo consigues una “recompensa”, logrando aumentar tu tiempo de uso y dándole a la red mayor margen para mostrarte publicidad.
Todo esto se debe a que nuestro cerebro es adicto a las recompensas, por lo que las redes nos mantienen con expectativas permanentes y cada cierto tiempo nos da un “premio”.
Y es así como están configurados los algoritmos de las redes sociales, con el objetivo de mostrarnos contenidos en un orden en que cree que podrá seguir manteniendo nuestra atención y no en el orden que se publica.