Después de casi un mes de incertidumbre, este domingo se conoció una de las mejores noticias para los hinchas del fútbol chileno. Aníbal Ortiz, arquero de la sub 12 de Universidad de Chile que sufriera un grave accidente de tránsito semanas atrás, dejó el hospital y volvió a su casa junto a su familia.
El pasado 1 de agosto se conoció que, tras el Superclásico con Colo Colo, el pequeño se había visto envuelto en un delicado momento y que lo llevó a estar internado en un centro médico bajo cuidados intensivos.
Claudio Bravo inició los mensajes de apoyo en redes sociales de parte del fútbol chileno para ir en ayuda de Aníbal Ortiz. Un accidente automovolístico lo mantuvo por 19 días en el hospital Carlos van Buren, luchando contra todos los pronósticos.
Pero este domingo y después de mucho esperarlo, se conoció que el joven arquero de la cantera de la U había recibido el alta médica para volver a su casa. Y si bien todavía tiene por delante una larga recuperación, poco a poco deja atrás uno de los momentos más complicados de su corta vida.
"Es algo maravilloso. La recuperación de mi hijo ha sido algo súper sorprendente para todos. Incluso los médicos se han sorprendido mucho: de haber estado muy complicado y ahora estar aquí con nosotros, que se pueda levantar, caminar un poquito, conversar con sus hermanos. Por lo menos a mí ya me volvió el alma al cuerpo, estaba demasiado preocupada", detalló a LUN su madre, Ivonne Castillo.
Además y para la tranquilidad de los hinchas, confesó que "por ahora está muy bien a nivel neurológico. Hay algunas cosas que, producto del golpe, no recuerda, pero habla y escribe súper bien. Mantiene la letra horrible, le digo yo, jajaja. Entiende súper bien, cuando uno le tira un chiste lo capta de inmediato. Los médicos quedaron tranquilos en ese sentido y cualquier secuela se va a ver de aquí a seis meses".
Aníbal Ortiz solo quiere jugar por la U otra vez
Aníbal Ortiz pudo volver a su casa y comenzar su rehabilitación bajo el calor de su familia. Aunque el pequeño arquero de Universidad de Chile solo quiere dejar todo atrás para hacer lo que más le gusta: jugar fútbol.
Así lo explicó su madre, asegurando que "lo único que quiere mi hijo es volver a jugar a la pelota, pero le explicamos que hay procesos que cumplir primero. Una vez que esté completamente recuperado y los médicos nos den el ok, ahí va a poder irse a las canchas, a jugar, a hacer lo que quiera".
Por ahora, Aníbal Ortiz puede hacer su vida con normalidad, pero atento a las secuelas. "Camina a ratos, puede levantarse de la cama, obviamente con alguien al lado, para que no se desestabilice. Pero por lo menos está caminando bien, que eso le preocupaba a los kinesiólogos en el hospital".
"A ratos descansa, juega, jugamos carioca o está con el teléfono. Él se viste solito, hay cosas que le cuestan todavía, pero ponerse un calcetín y abrocharse un zapato ya es un gran logro y eso lo puede hacer sin problemas", cierra.
