El martes 6 de septiembre se celebra el Día Internacional del Sexo. Y más alla de las formas que cada uno elija para festejarlo, la consultora global GfK realizó un estudio de la sexualidad de los chilenos. Cuatro mil personas, de todos los grupos socioeconómicos y de las principales cuidades del país, respondieron el cuestionario.
Lo primero es que un 69% de los consultados declara tener una vida sexual activa, pre y post cuarentenas, aunque un 56% está de acuerdo con la afirmación: “Me gustaría tener más sexo del que tengo actualmente”. Los hombres aparecen con un 63%, mientras que en las mujeres alcanza un 49%. Esta diferencia también se refleja entre los que están en pareja (66%) con los solteros (53%).
La satisfacción en la relación sexual obtuvo peores resultados. Solo un 43% reconoce haber llegado al orgasmo con facilidad (48% de hombres y 38% de mujeres). De las mujeres que no llegan al orgasmo, un 23% fingen tenerlo ante su pareja.
El estudio asegura que hay un aumento considerable en el interés por experimentar y probar métodos lúdicos en el ámbito sexual. El uso de lubricantes pasó de un 22% de uso en 2017 a 48% en 2022; el sexting (fotos, chats y sexo virtual) creció de un 13% a un 33% en el mismo período; los juguetes eróticos aumentaron en su uso de un 13% a un 28% en cinco años; los disfraces pasaron de un 13% a un 19%; y el uso de viagra de un 8% al 16%.
En general, el hombre admite con mayor frecuencia el uso de algunos de estos métodos, incluyendo Apps de encuentros y tríos, mientras que las mujeres se declaran usuarios de juguetes y disfraces en su vida sexual
Finalmente, el 34% reconoce haber sido infiel, situación mayoritaria en hombres (41% contra el 27% de las mujeres), mayores de 57 años y mayoritariamente de estrato social ABC1.

Sexo: una cuestión generacional

Las diferencias en la mirada sobre el sexo se comienzan a verificar en las diversas generaciones etarias, especialmente en las más jóvenes: La Generación Z (nacidos entre 1997 y 2000) presenta mayor preocupación por el uso de anticonceptivos (76%), contra el 56% de los Millenials (nacidos entre 1981 y 1993). Y la Generación Z está más abierta a probar con ambos sexos (16%), a diferencia del 5% de los Millenials en este punto. En términos globales, el 91% opta por tener relaciones con personas de sexo opuesto (93% en 2019).
El estudio revela una importante baja en uso de algún método anticonceptivo, de un 70% en 2019 a un 53% en 2022, siendo más prevalente en los hombres con descenso de 19 puntos porcentuales, versus las mujeres (-7pp). El condón (23%) y las pastillas anticonceptivas (15%) siguen siendo los principales métodos, pero con sustantivas caídas respecto de 2019 cuando llegaba al 35% y 24%, respectivamente.

Un ítem preocupante: los exámenes

El dato preocupante surge al consultar sobre el interés o preocupación por realizarse exámenes para detectar enfermedades de transmisión sexual. Un 52% de los encuestados admite no estar preocupado por hacerse chequeos en este sentido. Solo un 19% de hombres sí se los realiza, mientras que un 31% de las mujeres consulta por su salud sexual.
Sebastián Medina, director de investigación en GfK, explicó que “durante los últimos años se ve una clara apertura por parte de los chilenos en relación con su vida sexual. Cada vez se encuentran más dispuestos a arriesgarse y probar nuevas experiencias, sumando juguetes y disfraces; incluso en momentos donde las medidas de confinamiento no permitían mayores contactos, encontraron la forma a través de sexting. No obstante, los últimos años de pandemia también trajeron consecuencias negativas, como la disminución significativa de la prevención y control de enfermedades de transmisión sexual".