El Manchester United entró en caos, tal como en gran parte de la temporada, desde el principio del partido ante el Watford que no tuvo a Francisco Sierralta por lesión correspondiente a la jornada 12 de la Premier League en la que volvieron a demostrar que están lejos de cumplir las expectativas.
Apenas a los ocho minutos de comenzar el compromiso ya estaban en complicaciones cuando Scott McTominay cometió un penal sobre Joshua King, bastante complicado por un terrible despejo de Bruno Fernandes. El mediocampista escocés prácticamente lo tacleó y por eso se decretó la pena máxima.
Quien se apuró a tomar la pelota fue Ismaila Sarr pero su ejecución fue bastante mala al patear a la izquierda del arco, pero una gran intervención de David de Gea se lo negó. Sin embargo, el rebote quedó para que Kiko Femenía la mandara a guardar con un contundente disparo que terminó en el fondo de la red.
Luego de eso vino una revisión del VAR que evidenció que jugadores de ambos equipos hicieron invasión del área, uno de ellos Femenía, por lo que el cuerpo arbitral decidió que la ejecución debía realizarse de nuevo.
Pese a haber fallado, Sarr recibió nuevamente la confianza de ejecutar el disparo y volvió a elegir el palo izquierdo de De Gea, quien con otra buena estirada mantuvo el cero para el desordenado Manchester United.
