Exactamente una semana ha pasado desde que Lionel Messi y Barcelona separaron sus caminos, algo que parece lejano luego de todo el revuelo causado por el PSG al ficharlo en uno de los grandes golpes históricos en el mercado de fichajes que incluyó una apoteósica presentación.

Pero a la sonrisa del argentino le antecedieron unos momentos muy duros al tener que salir del club de sus amores y así lo contó en una de las entrevistas exclusivas que dio tras la conferencia de prensa a la BBC en la que relató detalles de esas horas en las que se concretó su salida.

El crack esperaba renovar pero luego que su padre y representante, Jorge Messi, se reunió con el presidente culé y llegó con la noticia. "Mi padre vino a casa. Él se había ido en la mañana a juntar con Joan Laporta. Cuando vuelve me lo dice y el bajón. Luego me tocó prepararme para decírselo a Antonela y así, contárselo a los nenes", afirmó.

La mayor preocupación, junto a la de su esposa, eran sus tres hijos. "Se lo dije a ella. Lloramos, nos amargamos y nos levantamos para ver cómo se lo decíamos a los nenes de la mejor manera. En diciembre ya les dijimos que nos quedábamos, que íbamos a seguir y sabíamos el golpe que iba a ser, más para Thiago".

Sin embargo, Messi espera que el proceso de su familia sea rápido. "Muchas veces pensamos demasiado y los chicos lo asimilan y lo aceptan de una manera que nosotros no pensamos. Sí Thiago lo lleva por dentro. Muestra que está feliz, contento y preparado para el cambio. Sé que es como yo, que lo está sufriendo por dentro sin expresarlo, pero tampoco es nada grave. Se adaptará como se adaptan todos", puntualizó.