Mario Salas tendrá este fin de semana un partido especial: enfrentará en la banca de Huachipato a Colo Colo, el club al que dirigió durante el 2019 y parte del 2020, donde fue despedido debido a los malos resultados que obtuvo en el inicio de ese torneo.
Pero más allá del rendimiento en la cancha, lo que sucedió fuera de ella fue noticia muchas veces. Al Comandante le costó manejar un camarín plagado de pesos pesados, quienes en su momento no compartieron la decisión de dejar partir al meta Agustín Orión.
Famosa fue la conferencia de prensa donde los jugadores albos apoyaron al arquero que se quejó contra Salas. Claro que de ese grupo, solamente uno podrá verse las caras con Salas en Talcahuano: Matías Zaldivia. Eso porque Esteban Paredes, Jorge Valdivia, Juan Manuel Insaurralde, Pablo Mouche y Carlos Carmona ya no están en el plantel.
Claro que no todo era tan terrorífico para Mario Salas. Brayan Cortés agarró la titularidad de la mano del entrenador, por lo que le está agradecido de la oportunidad y la confianza que le brindó en su momento.
Lo mismo con Gabriel Suazo. El actual capitán de Colo Colo era titular fijo en el esquema del Comandante, aunque lo hacía jugar en el mediocampo como volante mixto donde tenía mucha llegada al área rival. También Esteban Pavez tuvo un buen rendimiento con el DT, lo que le permitió ir a la Roja y emigrar al extranjero.
César Fuentes arribó a la tienda alba luego de que Salas lo convenciera, pues lo había entrenado en la Sub 20 y en la Universidad Católica. Eso sí, en Colo Colo no alcanzaron a compartir mucho tiempo.
A Carlo Villanueva le dio las primeras chances de ser titular, confiando mucho en sus condiciones. De todas maneras nunca pudo afirmarse en el puesto cuando daba sus primeros pasos en Primera.
En ofensiva, Marcos Bolados tuvo un buen rendimiento bajo su mandato y tenía mucha cercanía y cariño con el estratega, lo que quedó demostrado luego de que el Cacique ganara la Copa Chile en Temuco ante la U, donde fue uno de los que mojó al estratega.
También está Gabriel Costa, quien llegó al Monumental por petición del entrenador, que lo dirigió en Sporting Cristal. A pesar de marcar bastantes goles en su primera temporada nunca logró cuajar un alto rendimiento, el que mejoró con Gustavo Quinteros en la banca.
