En julio de 2016 se concretó lo que Marcos Bolados calificó como “un sueño”. Su traspaso desde Deportes Antofagasta a Colo Colo por un monto no especificado que rondó los 600 mil dólares por el 50 por ciento del pase del jugador que hoy fue el sorpresivo responsable de la victoria de Chile sobre Suecia en Sölna.

Pero sus progresos no han sido lineales. De hecho, viene apuntándose como figura de su generación desde que integró la fallida selección Sub 20 de 2015, que se despidió rápidamente del Sudamericano disputado ese año en Uruguay. A esas alturas, ya completaba dos años desde su debut con la camiseta de Antofagasta, de donde se despidió con 68 partidos oficiales y seis goles.

Se marchó a Colo Colo, pero las cosas no fueron fáciles. Llegó sin pretemporada por lo que retrasó su puesta a punto. Luego una serie de lesiones lo fueron marginando del grupo de favoritos de Pablo Guede y terminó sin siquiera aparecer en las citaciones del Cacique, con un registro de 18 partidos y cero goles.

Beñat San José lo había conocido en Antofagasta y lo llamó de inmediato cuando llegó a dirigir Universidad Católica. La negociación con Colo Colo se destrabó rápidamente y los cruzados consiguieron amarrar su arribo a San Carlos de Apoquindo a cambio de unos 180 mil dólares, con opción de compra.

Este monto no se ha desclasificado, pero representa la sumatoria para los dos dueños del pase, en este caso Colo Colo y Deportes Antofagasta, por lo que se estima que ronda los tres millones de dólares. Una inversión millonaria que blindó al que en su momento aparecía como gran revelación del fútbol chileno y respaldó el Cacique para “no potenciar al rival”.

A los 22 años, Bolados le imprimió un nuevo vértigo a su carrera. Se hizo importante en Universidad Católica (ha jugado los seis partidos del campeonato) y fue citado por Reinaldo Rueda a una nómina local, la misma que había integrado antes de la Copa América Centenario con Juan Antonio Pizzi.

Sin embargo, ahora sí hubo pulgar arriba para el antofagastino y el técnico colombiano le renovó su confianza con un lugar en la nómina para sus primeros amistosos internacionales. Fue así como salió a la cancha esta tarde en el Friends Arena de Sölna para firmar con un gol su debut en la Roja. Soñado para el joven puntero antofagastino.

Fotos: Agencia Uno