Tesla tiene una planta importante en Fremont, en el condado de Alameda, California, donde actualmente hay una cuarentena producto del coronavirus.

Pese a eso, la empresa de Elon Musk decidió retomar las labores, por lo que le han exigido a sus empleados volver a trabajar bajo la amenaza de quitarles sus beneficios.

Según informaron trabajadores de Tesla a The Guardian, les enviaron una correo indicando el retorno, en el que dice textualmente: “Si no se siente cómodo al ir al trabajo, puede quedarse en casa y tendrá una licencia sin goce de sueldo. Elegir no presentarse a trabajar puede eliminar o reducir su elegibilidad para el desempleo, dependiendo de la agencia de desempleo de su Estado”.