Alemania aprobó los pilares de la legalización de la marihuana. El consejo de ministros de la denominada ‘coalición semáforo’, aprobó el uso recreativo de la marihuana. Así, adultos podrán comprar, poseer y consumir hasta 30 gramos y, además, el cannabis y el ingrediente activo THC ya no serán calificados como narcóticos.

Tras conseguir un acuerdo en el consejo de ministros, el titular de salud germano, Karl Lauterbach aseguró que la legalización del cannabis aporta seguridad a consumidores y se garantiza una mayor protección a niñas, niños y jóvenes.

Lauterbach, quien se opuso a la legalización previo a ser ministro, comentó que, con la prohibición anterior, Alemania “no había logrado ningún éxito notable” en su política de control de drogas; sino que, por el contrario, el consumo había aumentado y el comportamiento adictivo problemático.

Pese a que se aprobaron los lineamientos generales de compra y consumo, no hay una fecha determinada para que entre en vigencia la normativa aprobada. Esto porque el acuerdo debe pasar algunas trabas legales relativas al derecho internacional, principalmente a las normas de la Unión Europea (UE).

Marcha por la legalización en Alemania (2016)

En vista de ello y que el marco legal internacional ofrece “opciones limitadas para implementar el plan de la coalición” el Gobierno germánico se comprometió a presentar el proyecto de Ley en cuanto se tenga la certeza que la UE no tendrá objeciones legales a la liberación planificada.

Consumo de marihuana

La liberación del consumo será para mayores de edad, con principal atención a jóvenes entre 18 y 21 años “debido al mayor riesgo de daño cerebral relacionado con el cannabis en la adolescencia”. En estos casos, se contemplará que los productos tengan un límite del 10% del ingrediente activo THC.

Adultos que deseen cultivar, podrán hacerlo teniendo como máximo tres plantas con flores femeninas. En el caso de autocultivo, el adulto deberá proteger que niñas, niños y jóvenes no tengan acceso a las plantas.

A nivel de productos, se permitirá la venta de cannabis para fumar e inhalar o ingerir por medio de cápsulas, aerosoles o gotas. Mientras que la venta de comestibles como galletas, dulces, queques u otro tipo de comestibles, se mantendrá prohibida.

Solo mayores de edad podrán ingresar a tiendas especializadas con licencia y estará prohibida la publicidad y la venta electrónica. A los productos se le aplicará el IVA y se planea un llamado ‘impuesto al cannabis’ basado en la cantidad e THC de los productos, la idea es que el precio final al consumidor “se acerque al precio del mercado negro”.