Manuel Rojas fue uno de los grandes volantes de creación que tuvo el fútbol chileno. En la época en la que jugar de 10 era un privilegio, supo destacar desde su debut en 1973 en Palestino, para luego jugar en América de México, U. Católica y la selección chilena, antes de emigrar a Estados Unidos.

Terminó su carrera en Estados Unidos, jugando incluso fútbol indoor. Por eso se radicó en Chicago, donde montó una pizzería a la cual le dedico mucho esfuerzo.

“Tuve una pizzería por 10 u 11 años, mientras nuestros hijos estaban en la universidad. La cerramos cuando ellos ya se fueron, era mucho trabajo, mucha presión, muchas horas. Ahí busqué otros rumbos”, cuenta a Redgol desde el estado de Illinois.

-Una linda ciudad para vivir esa, llena de historia.

Es preciosa. He ido a partidos de Chicago Bulls y de otros deportes. Es muy lindo acá y por algo me quedé por más de 40 años en este país. Las cosas se nos han dado bien, es una felicidad estar acá, que se acostumbraran nuestros hijos.

-¿Estados Unidos es muy bueno para asentarse con la familia?

Yo disfruto a la familia, a mis hijos y mis nietas. Trabajo para un club privado que tiene cerca de 70 equipos. Trato de enseñar a niños, que aunque no son los mejores, están aprendiendo a los 11 o 12 años.

Manuel Rojas (derecha) junto a su cuñado Guido Coppa y sus respectivas señoras

-¿Busca talento latino en esos niños?

No. Trabajé siempre con norteamericanos, más que con hispanos. Había siempre algún niño latino, pero el 90% eran americanos.

¿Y sigue jugando al fútbol mostrando su talento del pase filtrado?

Ya tengo 71 años. Me mantengo bien, mi señora me cuida mucho. Pero ya no estoy para jugar pichangas, a no ser que uno juegue paradito, ja, ja.

Echa de menos a los “10” en el fútbol chileno

-¿Tiene contacto con sus ex compañeros de Chile?

Hablo poco con ex compañeros, sólo hablo con Guido (Coppa, ex futbolista y su cuñado) quien me mantiene al tanto de lo que pasa en el fútbol chileno. Conversamos de partidos internacionales, pero es la única información.

Manuel Rojas celebra un gol con Palestino, elenco con el que fue campeón en 1978

-¿Siente que le faltó algo en el fútbol?

No me quejo de lo que me dio el fútbol. Gané campeonatos en Palestino, jugué por la selección siendo que la calidad en esa época de jugadores era muy grande, muy competitiva. Había que estar preparado. Ese sacrificio valió la pena. No eran los contratos de ahora, pero no puedo quejarme.

Usted era un gran número 10 y hubo buenos exponentes en Chile.

Sí. Me gustaban Valdivia y Fernández últimamente, grandes jugadores de gran técnica. Muy activos siempre cuando tenían el balón.

-¿Extraña que ya no salgan esos jugadores?

Ha pasado por los entrenadores, limitan al que tiene realmente mucha calidad. Ahora les gusta que corran y marquen, pero estos jugadores hubiesen jugado en cualquier época a uno o dos toques, o sacándose jugadores. Las limitaciones han sido grande para jugadores de no mucha marca. Pero yo entiendo el fútbol de otra manera: si no te quitan la pelota, eres el mejor defensor, porque tu equipo es el que tiene el balón.

-¿Vio a la Roja de Gareca en estos últimos años?

Fue triste ver que no pudimos superar a equipos a los que antes éramos superiores. Pero han cambiado las cosas, sale un jugador bueno, con condiciones para foguearse en el país y se van para no jugar. Eso es lo que a Chile lo ha dañado más. Salen jóvenes y es poco lo que juegan, siempre los están esperando.