Jaime Vera es recordado como uno de los jugadores más reconocidos de Colo Colo en la década de los '80. El Pillo fue tricampeón de Copa Chile y el Campeonato Nacional con el Cacique antes de saltar a Europa.

Sin embargo, en su origen no tenía al Cacique en el ADN. En conversación con La Redgoleta de RedGol, el entrenador de Deportes Iquique reconoce que en su niñez y primera juventud era hincha de Universidad de Chile.

"Yo te cuento. Donde yo nací y me crié son todos de la U. Mis papás eran de la U, mis hermanos siguen siendo de la U, mi tía sigue siendo de la U, mis primos siguen siendo de la U, tengo sobrinos que son todos de la U, y el único colocolino fui yo", revela.

Jaime Vera se ha convertido en uno de los entrenadores más regulares del fútbol chileno (Agencia Uno)

Jaime Vera se ha convertido en uno de los entrenadores más regulares del fútbol chileno (Agencia Uno)

"En realidad, yo también era de la U, pero después como llegué a colo Colo y me quedé ahí desde los 13 años, yo me convertí en un colocolino más. Porque fui conociendo gente, haciéndome amigos y compañeros de fútbol", reconoce Vera.

"Por lo tanto yo me fui criando en Colo Colo y me convertí en colocolino. Pero mi gente, mis familires siguen siendo de la U hasta el día de hoy. Muy respetuosa la familia, porque cuando jugué, gané o perdí con la U, como jugador o como técnico, nunca me dijeron nada", destaca.

Recuerdo azul

A Vera le tocó protagonizar grandes partidos con Colo Colo ante Universidad de Chile. Recordado es un inolvidable golazo a Jaime Tejeda en 1983, aunque en lo personal no era tan sencillo. "Trataba de llegar tarde a la casa para que estuvieran todos durmiendo, así no me decían nada", asegura.

"Cuando era chico, mi primo me llevaba al estadio y yo no iba a ver a Colo Colo, iba a ver a la U. Cuando jugaba el Toro Aránguiz, Carvallo, Barrera, el Chico Hoffens, Koscina, un volante bastante bueno, el Flaco Spedaletti. A Pellegrini lo vi jugar, tuve la suerte de jugar contra él y fui compañero en una selección chilena", rememora.

"Era de la U y me acuerdo bastante bien de los jugadores de esa época. La U no era un equipo que estuviera siempre peleando campeonatos, en ese tiempo era más sufrir que celebrar", asume el DT.

"En los '70 estaba Colo Colo del '73, estaba muy bien Palestino, Unión Española, Huachipato que tenía un equipo fuerte con Pedro Morales, Audax Italiano, y la Católica. Pero la U en esos tiempos, después del Ballet Azul empezó a sufrir más que a celebrar", completa.

Una pasión inextinguible

Jaime Vera reconoce que vibra mucho con el fútbol: "Siempre fui bien apasionado para esta cuestión del fútbol, hasta el día de hoy. Y creo que lo máximo que tiene el fútbol es el gol y a mí me gustaba hacer goles. Por lo tanto, expresaba toda mi emoción cuando hacía un gol".

"El fútbol ha sido la pasión de toda mi vida y sigo expresándolo igual. Ahora como entrenador, que grito con mucha fuerza y emoción los goles de los jugadores que hemos dirigido. La única diferencia es uno tiene un espacio bastante reducido para moverse", asume.

"Pero sigo viviendo el fútbol como cuando chico, la frustración en la derrota y la alegría en la victoria. Sigo teniendo la fuerza de estar en el fútbol y espero tener estas ganas por mucho rato. Todavía considero que soy un entrenador de experiencia, pero que le falta para decir hasta aquí no más llego. Tengo 57 años y me siento muy bien", sentencia.

Y marca una diferencia con la actualidad. "Los jugadores jóvenes no tienen tanta pasión como los de antes. Además que a ellos los envuelven mucho las redes sociales, la tecnología", explica.

"Hoy día los jugadores son un poco más incrédulos en eso de la pasión y de la efervescencia, del amor que uno tiene que tener por el fútbol. Hace 20 años los jugadores cambiaban muy poco de quipo y uno sentía pasión por la camiseta que tenía", reflexiona el Pillo.

"En Chile jugué siete años en Colo Colo, después tuve la suerte de irme a jugar a Europa, pero siempre pasé muchos años en los equipos y eso a uno lo identifica. Por eso aquí en Chile me identifican mucho en Colo Colo, excepto cuando estuve en Cobreloa", puntualiza.

"Ahora los jugadores cambian cada seis meses o un año y no se identifican mucho con la camiseta. Ahí hay una variación bastante sustantiva en la pasión por el fútbol", completa.