El gobierno anunció que enviará el proyecto de Pensión Garantizada Universal al Congreso durante la próxima semana y aunque no solicitó alguna urgencia de discusión, se prevé que el trámite sea de corto plazo.
Con la medida se busca garantizar una pensión mínima correspondiente a la línea de la pobreza a todas las personas mayores de 65 años que pertenezcan al 90% de la población más vulnerable.
El monto base es de $185.000, que se entregará por transferencia directa al 80% de la población. Quienes se ubiquen en el rango del 81% al 90%, recibirán un porcentaje, y se entregará independientemente si la persona está o no pensionada.
Al tratarse de un pago base, la pensión aumentará con el ahorro individual que cada persona registre en su cuenta de capitalización personal o con los sueldos que perciben quienes no se han jubilado.
¿Qué falta para que se apruebe?
La iniciativa aún no ingresa al Congreso, pero se prevé que durante la próxima semana el Gobierno lo envíe parlamento. Se espera que la tramitación sea expedita, ya que habría acuerdo transversal en todos los sectores políticos.
Sobre la tramitación, el Ministro de Hacienda, Rodrigo Cerda, sostuvo que “antes de ingresar al Congreso, debemos pasar por el proceso consultivo de pensiones. Esperemos que eso salga lo más rápido posible para poder ingresar rápidamente”.