La Contraloría detectó gastos irregulares en el Ejército por ejecución presupuestaria en el extranjero. Las irregularidades en cuestión ocurrieron entre enero 2019 y diciembre 2020; donde incluso se detectó un gasto sin autorizaciones acreditadas, por $14 millones en un premio “al mejor comandante”, sin que se justificara la motivación del premio ni se identificara al premiado.
Durante la jornada de este jueves la Contraloría General de la República entregó el informe donde descubrieron las anormalidades en, a lo menos, 10 ocasiones, donde se presentaron desórdenes: administrativos, en la rendición y en la ejecución presupuestaria de agregadurías militares.
Según la información entregada, las agregadurías militares utilizaron cerca de $2 millones de dólares en los gastos, lo que equivale a algo así como $1.858 millones.
Tras la investigación, se establecieron plazos entre 30 y 60 días para que el Ejército pueda corregir los errores y realizar las devoluciones de los montos asignados a las agregadurías.
Dentro de las irregularidadesdetectadas por la Contraloría se encuentran: ausencia de conciliaciones bancarias, inexistencia de cuentas corrientes para la administración de presupuesto, no envío de rendición de cuentas, inexistencia de documentos acreditando rendiciones autorizadas, ingreso de rendiciones al Ejército por ítems sin detalles, entre otras.
También se registraron irregularidades en gastos de vivienda, transporte, arriendo de vehículos, pago de intereses por mora y un gasto “improcedente por la compra de una máquina contadora de billetes”.
Junto a todo ello, el ente fiscalizador detectó un curioso caso de una agregaduría militar en la que se gastó $14 millones para un denominado “premio al mejor comandante”, sin que se acreditaran autorizaciones, motivos del premio y ni siquiera se identificó al premiado.