Un desalentador análisis sobre el presente de la selección chilena hizo Aaron Strain para el sitio irlandés Balls, en una columna que titula “Auge y caída de la fundida generación chilena”, donde aborda a la Roja después de ganar las dos últimas Copas América.

Según el texto, después de que Chile quedara fuera del Mundial de Rusia en las eliminatorias sudamericanas “todos empezaron a sufrir”. Y luego enumera los casos más emblemáticos de los protagonistas de la Generación Dorada.

“El paso de AlexisSánchez a ManchesterUnitedha sido un desastre absoluto. La degradación a la suplencia de ClaudioBravo es una prueba de la nueva moda de arqueros de clase mundial que calientan la banca en equipos grandes”, asegura.

Pero no se queda ahí. “Arturo Vidal ha sido material de banca en el Barcelona y solo ha jugado dos partidos completos. También ha perdido minutos Gary Medel, pese a haber cambiado el Inter de Milán por el menos competitivo Besiktas”.

Y sigue enumerando el cisma. “Mauricio Isla está metido en una de las historias más desastrosas del fútbol europeo este año con Fenerbahce (…) Charles Aránguizha sufrido tres lesiones serias desde que llegó a BayerLeverkusen”.

“¿Se acuerdan de MatíasFernández, el mago dribleador que reinó en Sportingde Portugal y Fiorentina? No funcionó su préstamo al Milan, terminó en Necaxa y ahora juega a préstamo en Atlético Junior, de la Primera Categoría de Colombia”, agrega.

Y un párrafo especial para Eduardo Vargas. “Cabe destacar que nunca ha trascendido a nivel de clubes, como lo hizo en las dos Copas América, pero a los 29 años juega en México después de desilusionar por dos años y medio a los hinchas de Hoffenheim”.

Luego viene el meollo del asunto. “Entre estos ocho jugadores -Alexis, Bravo, Vidal, Medel, Aránguiz, Isla, Fernández y Vargas- suman 673 partidos por la selección, más de 96 en promedio por cada jugador”.

“Es una carga pesada para chicos de entre 29 y 32 años, e incluso un potente debilitador de sus carreras. Podemos dejar que el periodista diga que la forma de Alexis decayó porque estaba exhausto, pero una mayor investigación muestra que el burn out (fundido) es la respuesta más lógica”.

“Estos muchachos iluminaron el planeta fútbol durante dos años. Es triste que parezca que el costo lo asumieron sus propias carreras individuales”, completa.