Cuando muchos pensaban que la historia en la Conferencia Oeste ya tenía un final escrito, los Dallas Mavericks mostraron de qué están hechos y consiguieron su primer triunfo ante los Golden State Warriors, demostrando que esto es la NBA y nada está dicho aún.
Los de San Francisco llegaban al American Airlines Center con la serie 3-0 a su favor, por lo que, si ganaban, sacaban pasajes de manera inmediata a la gran definición por el título de la mejor liga de básquetbol del mundo. Sin embargo, los Mavs demostraron el nivel que los trajo a esta instancia y logró conseguir una victoria clave para mantenerse con vida.
Si los de Dallas querían derrotar a los Warriors, iban a necesitar una buena actuación de su gran estrella Luka Doncic, y este no les falló con 30 puntos, 14 rebotes y 9 asistencias. Ya desde el primer cuarto salieron con todo y lograron irse arriba en el marcador desde un principio. En los siguientes, poco a poco fueron ampliando su ventaja en el marcador, contando también con la gran performance de Dorian Finney-Smith.
Los Warriors viajaron a Dallas con la ilusión de cerrar su paso a la definición por el título de la NBA, pero se encontraron con un gran nivel de los locales. Entraron al último cuarto con una desventaja de 29 puntos, por lo que extremaron recursos para intentar una remontada final que les diera la victoria, llegando a estrechar la diferencia a 8 unidades, pero no les alcanzó.
Finalmente, el marcador favoreció a Mavericks por 119 a 109, con lo cual logran quedarse con su primer triunfo y además, estirar la serie a un quinto partido. Eso sí, no tienen margen de error: deben ganar los tres juegos restantes para quedarse con la victoria, mientras a los Warriors les basta con un triunfo más para ir por el anillo de la NBA. El siguiente encuentro se disputará en el Chase Center de San Francisco el jueves 26 de mayo a las 21:00 horas de Chile.
En la final de la Conferencia Este, Miami Heat y Boston Celtics igualan 2-2, por lo que al menos en esta serie están garantizados dos juegos más para conocer al equipo que irá por el título de la NBA.
