Con [[Arturo Vidal]] en las gradas por no ser convocado por lesión en el partido ante el Sevilla, Bayern Munich goleó por 4-1 al Augsburgo y se consagró campeón por sexta vez consecutiva y demostrando que la monarquía bávara sigue a pie firme en la Bundesliga.

Si bien en el campo se vio una celebración más tranquila de lo habitual, en el camarín aparecieron los cánticos y el alcohol común cuando se festeja una copa o liga. Todos los jugadores, incluso los no citados, aparecieron para cantar campeones.

Arturo Vidal estuvo presente junto a su compadre Franck Ribery y cantaban al ritmo de todo el plantel, mientras que otros jugadores sacaron a relucir las botellas de champaña para la celebración. Un gran momento es el que está viviendo el King en Alemania.